Una juez de Alicante envió ayer a prisión a un joven detenido tras haber sido grabado dando una paliza a su pareja sentimental en Sant Joan d'Alacant. El hombre fue detenido de oficio por la Guardia Civil tras recibir un vídeo de la comunidad de vecinos que registró la brutal agresión. La víctima no quiso ni presentar denuncia, ni declarar contra su agresor, ni ser examinada por un forense para conocer el alcance de sus lesiones. El presunto agresor es un joven ucraniano, de 22 años, que recibió a su pareja sentimental, una mujer húngara de 38 años, a puñetazo limpio en el portal de su casa.

La agresión a la mujer fue cometida el pasado domingo sobre las siete de la mañana. A esa hora llegaba la mujer a su domicilio en Sant Joan d'Alacant y, según se observa en el vídeo grabado dentro del portal, la víctima apenas da unos pasos cuando aparece en escena su pareja y sin mediar palabra comienza a golpearla incluso en el suelo. Mientras la víctima estaba aturdida el agresor sale a la calle para comprobar que no hay testigos y vuelve para continuar golpeándola. Durante cinco minutos el compañero de la mujer se ensañó con la víctima y al final la agarra por el pelo y la arrastra por las escaleras hacia el ascensor. La agresión presuntamente habría continuado pero ya lejos de la cámara de grabación que decidió instalar la comunidad de vecinos del inmueble a raíz de varios robos sufridos en sus viviendas.

La víctima de la agresión no denunció a su pareja pero el vídeo dejó atónitos a los vecinos que vieron la grabación unas horas más tarde. Dada la brutalidad de la agresión no se lo pensaron dos veces y comunicaron lo sucedido a la Guardia Civil de Sant Joan.

Los investigadores de la Benemérita acudieron a la vivienda y la mujer inicialmente negó incluso que le hubiera agredido. La Guardia Civil cree que no había interpuesto denuncia por miedo a sufrir más actuaciones, aunque al actuar de oficio la Benemérita admitió que le había pegado. Sin embargo, la mujer declaró a los agentes que no quería denunciarlo ni que le pusieran una orden de alejamiento.

Inicialmente la agresión se iba a resolver con una conformidad, en la que el detenido iba a aceptar una pena de seis meses de prisión. Sin embargo, tras visionar las violentas imágenes de la agresión, la Fiscalía rechazó cualquier acuerdo y pidió que el acusado fuera encarcelado hasta que se celebre el juicio por estos hechos en el juzgado de lo Penal seis de Alicante el próximo 9 de diciembre. A pesar de que se le pide una pena de nueve meses de prisión, la fiscal optó por pedir a la juez el encarcelamiento ante la brutalidad de las imágenes, por el riesgo para la víctima.