La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha decretado la alerta amarilla por tormentas en la ciudad de Valencia y por fuertes lluvias en el litoral norte de la provincia a lo largo del día de hoy. Durante toda la jornada se espera que siga lloviendo, puesto que, siempre según Aemet, existen entre un 95 y un 100 % de probabilidades de que el cielo descargue de nuevo con intensidad sobre el 'cap i casal'.

Las fuertes precipitaciones caídas ayer sobre la ciudad han obligado a suspender de nuevo las clases en el CEIP 103 de Valencia. La decisión la ha tomado la Dirección Territorial de Educación. Es la segunda vez en poco más de una semana que se opta por el cierre como medida de seguridad en un centro escolar formado con barracones y en el que las filtraciones de agua se repiten cada día de lluvia.

Por su parte, el barrio de Natzaret continúa anegado y los vecinos acusan al puerto de falta de mantenimiento del alcantarillado.

Problemas en las carreteras

Las carreteras de acceso a la ciudad de Valencia han registrado numerosos problemas de tráfico a primera hora de la mañana de hoy debido a que algunas aún se encontraban anegadas por el agua. Los problemas más destacados han estado en el área metropolitana y, sobre todo, en Camp de Morvedre, adonde se desplazaron las nubes durante la pasada madrugada para descargar con fuerza en las últimas horas de la noche y las primeras del día.

En el área metropolitana de Valencia había esta mañana carreteras impracticables, como el acceso al polígono industrial de Catarroja, o la CV-365, a la altura de Paterna y en ambos sentidos, que estaba afectada por la lluvia. A las 11.30 horas, la situación en esta vía seguía siendo la misma.

En la CV-33, a la altura de Picanya, también se registraban problemas (había dos kilómetros de retenciones) a las 8.30 horas mientras que la circulación era muy complicada al haber al menos cuatro puntos conflictos debido a sendos accidentes ocurridos en Burjassot, Manises, Paiporta y Valencia.

En este último, acaecido en la V-31 o Pista de Silla, se han llegado a contabilizar hasta dos kilómetros de atasco, mientras que en la CV-33, a la altura de Paiporta, se registraban otros dos kilómetros de retenciones. En la N-220, en Manises, había otros dos kilómetros de atasco y en la CV-30 eran 1,5 kilómetros a la altura de Burjassot. En esa misma vía, había otros dos kilómetros de colapso por la intensa circulación y 1,5 más a la altura de Paterna.

También en la CV-33 y a partir de las nueve de la mañana, en Picanya, había dos kilómetros más de atasco por el tráfico, 2,5 más en la V-30, a la altura de Quart de Poblet, y otros dos en término ya de Valencia. Además, se registraban dos kilómetros de tráfico intenso en la CV-35 o Pista de Ademuz, a la altura de San Antonio de Benagéber y siete en la V-21, en Valencia, así como otros 3,5 kilómetros más en la CV-36, también en Valencia.

En total, las lluvias, los accidentes y la intensa circulación han originado un verdadero caos de tráfico que ha llegado a sumar hasta 40 kilómetros de atasco de manera global entre Valencia y el área metropolitana. Antes de las 11.00 horas, la situación había regresado ya a la normalidad y únicamente permanecía afectada la CV-365 en Paterna.