Las sanciones de la Unón Europea a Rusia «están dañando mucho la economía valenciana», protesta Ramón Congost. Él calcula que suponen una pérdida de «más de 700 millones de euros» anuales por la reducción en la exportación citrícola y de otros productos del campo. También por la caída del rublo, que reduce el poder adquisitivo y frena la adquisición de viviendas de la Comunitat Valenciana por parte de compradores rusos. Espera a que se levanten las sanciones para que las relaciones comerciales fluyan más. p. c. valencia