La diputada de Compromís en las Corts Mireia Mollà no vivió en 2017 su mejor inicio de año. El atestado elaborado por la Policía Local de Elx recoge que la también concejal de Relaciones Institucionales de ese ayuntamiento llamó al intendente jefe del cuerpo para tratar de revocar una orden de los agentes, que habían expedido una denuncia por varias infracciones y habían instado a retirar la música en el local en el que la parlamentaria celebraba la Nochevieja.

Según el relato, una patrulla especializada se personó en el establecimiento de la pedanía ilicitana de Torrellano donde se encontraba Mollà, después de que un local cercano denunciara que el otro no tenía licencia para emitir música. Los agentes tenían orden de realizar una inspección porque, al parecer, ya se habían producido problemas con anterioridad.

A la una y cuarto de la madrugada, la patrulla acudió al local, que sólo tiene licencia como cafetería pero sin ambiente musical y un aforo limitado a 73 personas. Pero los agentes encontraron al doble de personas, unas 150, y una pista de baile improvisada con música como una discoteca.

En ese momento, los agentes instaron a retirar la música y denunciaron las infracciones. En ese momento, cuando notificaban la decisión al propietario, relatan que apareció la concejal Mollà, «al parecer cliente del local y conocida del propietario». En ese momento se produce una «mediación» con los policías «para ver si se podía obviar la intervención, indicándonos reiteradamente que no se trata de un establecimiento problemático», dice el informe.

Pidió que revocara la orden

Los agentes añaden que respetuosamente informaron varias veces de cuáles eran sus órdenes y de la legislación vigente, ante lo cual la parlamentaria optó por telefonear al intendente jefe «solicitándole si la orden puede ser revocada», escribieron en el documento oficial.

Finalmente el responsable policial optó por enviar al oficial de servicio al lugar para que estudiase la situación. El oficial decidió finalmente que, dadas las fechas tan especiales y la concurrencia de personas en el local, se continase con la música hasta el cierre, aunque insistieron al responsable del local de la excepcionalidad de la medida y se le instó a rebajar el volumen advirtiéndole de que ante una sola llamada vecinal de queja tendría que apagar la música. Los agentes comprobaron después que el local cumplió el horario de cierre ampliado a las 3.30 horas.

Reproche del sindicato policial

El pasado lunes, el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España ya envió un escrito al alcalde, Carlos González, en el que denunciaba la «injerencia» de la diputada en la actuación de la Policía Municipal.

El PP de Elx ha reclamado también la dimisión de Mollà ya que consideran que la concejal utilizó su cargo para fines particulares. El PP asegura que Mollà intentó evitar que se cerrara la cafetería pese a que no tenía licencia para celebrar fiestas, ni para poner música, ni para acoger el aforo que tenía en el momento de la intervención. «Es caciquil y roza la corrupción», señala el portavoz de los populares ilicitanos, Vicente Granero.

Desde el PP regional aseguraron que la dimisión se había exigido en el ámbito local que es donde se había producido la actuación de la concejal, pero las fuentes consultadas instaron a la vicepresidenta de la Generalitat y portavoz del Consell, Mónica Oltra, a explicar si la actuación de la diputada de su grupo le parecía ética y estética.

La portavoz adjunta de Compromís ya había salido días atrás a defender su actuación y ayer reiteró sus argumentos en una rueda de prensa en Elx. Mollà defiende que su actuación fue únicamente como «mediadora» para evitar que se produjeran altercados en caso de ordenar el repentino desalojo en el local.

Una preocupación que, según ella misma, le habían trasladado los vecinos. Mollà defiende que llamó al jefe de la Policía Local para ver si podría ser «menos drástica» la operación y, según la segunda teniente de alcalde fue el jefe de Operaciones el que se encargó de evaluar el problema.

La diputada insiste en que sólo medió para evitar un altercado

La diputada de Compromís aseguró ayer durante una rueda de prensa en Elx, localidad de la que es concejal, que los detalles de lo ocurrido sólo interesan al PP pero que dará todas las explicaciones que hagan falta. Mollà admite que llamó al jefe de la Policía Local de Elx durante la celebración de la Nochevieja por la situación que se había creado por el dispositivo policial «y para que valorara una instancia superior». Mollà asegura que sólo trasladó la versión de lo que ocurría para evitar desórdenes o altercados. Finalmente, los agentes decidieron no cerrar el local. Mollà destacó la actitud ejemplar de las personas que estaban que en el local y en la calle en la pedanía de Torrellano, donde se produjo la intervención policial .