El Instituto Geográfico Nacional (IGN) registró anoche un seísmo de 2,9 grados de magnitud (II en la escala Ritcher) y con epicentro en Aigües. El terremoto alertó a los vecinos de la comarca, especialmente a los residentes en la citada localidad, donde algunas personas sintieron cómo se les movían el sofá y las lámparas de sus casas. El terremoto se produjo concretamente a las 21.55 horas y pocos minutos después se regitraron hasta dos réplicas de menor intensidad (2,5).

El Instituto Geográfico Nacional publicaba en su web de alertas que el seísmo tuvo lugar a 10 kilómetros de profundidad. El movimiento fue registrado inmediatamente por la Red Sísmica del IGN. De hecho, esta red cuenta cerca con una estación sismológica, concretamente en las Cuevas de Canalobre, instalación que pertenece a la Universidad de Alicante.

Los vecinos que vivieron el evento sismológico se alertaron por un fuerte ruido, «como un crujido», seguido de «un temblor que se sintió en la casa incluso con un leve movimiento de las lámparas y del sofá», explicaba uno de los residentes en Aigües. Allí, el terremoto se pudo sentir con fuerza y con una menor intensidad también fueron testigos algunos vecinos de Busot e incluso de Xixona.

En Italia, el primer temblor de 5,3 de magnitud se ha producido hacia las 10.15 horas, con epicentro en la provincia de L'Aquila, que ya fue golpeada en 2009 por un terremoto de 6,3 de magnitud que dejó unos 300 muertos. En concreto, según el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), el epicentro se ha registrado entre L'Aquila y Rieti, a 110 kilómetros al norte de Roma, a una profundidad de 10 kilómetros.

A este temblor, según el INGV, han seguido otros de magnitud inferior, pero a las 11.15 se ha registrado un nuevo seísmo de 5,4 de magnitud, en la misma zona, y diez minutos después ha habido otro temblor de 5,3.

Un nuevo terremoto de magnitud 5,1 en la escala de Richter, según primeras estimaciones, volvió a sacudir el centro de Italia en torno a las 14:33 horas locales (13:33 GMT).