La Universitat de València (UV) adjudicó ayer más de medio millón de euros en ayudas al estudio de grado y máster correspondientes al pasado curso 2015-16. La vicerrectora de Estudios de Grado, Isabel Vázquez, detalla que «se han concedido 652 becas de un total de 2.323 solicitudes», lo que supone el 28 %. «Se han rechazado 603 (el 26 %) por superar el nivel económico de renta y el resto, prácticamente todas por disfrutar de otra beca», bien del Ministerio o de la Conselleria de Educación, añade.
Vázquez destaca que la UV «ha agotado e incluso superado el presupuesto», que cuando se convocaron estas ayudas hace 10 meses ascendía a 550.000 euros. Las 652 ayudas al estudio concedidas casi doblan las 369 adjudicadas en el curso 2014-15.
La vicerrectora ha sido la primera en pedir disculpas a los estudiantes por la demora en la resolución de la convocatoria. «Lamento mucho el retraso y me siento molesta por ello, pues habíamos intentado que estuviera todo a punto para adjudicar nuestras becas una vez publicara la Conselleria de Educación sus becas y no ha podido ser».
Estas ayudas son incompatibles tanto con las becas del Gobierno como con las de la Generalitat. El universitario solicita las tres con el fin de lograr al menos una, con lo cual la convocatoria no se puede resolver hasta que ministerio y conselleria concluyen el proceso.
Las del ministerio son más difíciles de conseguir pues los umbrales de renta son más bajos, 38.831 euros de ingresos anuales para una familia de cuatro miembros, mientras que en las del Consell y la UV el tope es de 43.846 euros. Como se trata de ayudas competitivas, es decir que se dan de mayor a menor puntuación hasta que se acaban los fondos, el alumno que no logra la del Consell opta a la de la UV.
La Generalitat convocó sus becas del 2015-16 con el curso acabado y el Tribunal Superior las paralizó dos meses por un recurso de la Universidad Católica de València contra la exclusión de sus alumnos. No fue hasta el 4 de enero cuando la conselleria publicó la resolución.
Errores al cruzar datos
A partir de esta fecha la Universitat inició la adjudicación. Esta convocatoria ha sido la primera en la que la gestión ha pasado del Servicio de Información y Dinamización (SEDI) al Servicio de Estudiantes, preparando un programa informático para agilizar la tramitación, «pues hasta ahora se hacía casi todo a mano», apunta Vázquez.
«Queríamos mejorar todo el proceso, pero al cruzar los datos con Hacienda para comprobar la renta y con la Conselleria de Bienestar Social para cotejar los títulos de familia numerosa, nos dimos cuenta de que había errores, por lo que ha habido que rehacer el programa informático», lamenta.
