El PP de la Comunitat Valenciana echó ayer el resto para tratar de movilizar a sus militantes en el proceso de primarias ( inédito en la historia de la organización) convocado para elegir a la nueva cúpula ejecutiva y evitar el temido pinchazo. Hoy martes, 28 de febrero, se cumple el plazo para la presentación de las precandidaturas, pero también para registrarse como votante y compromisario. La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, que aspira a ser legitimada por las bases, ha logrado reunir cerca de 4.000 avales, un cifra contundente, pero sobre todo simbólica ya que sólo necesitaba 99 para concurrir y, además, carece de rival en esta carrera. Entre los firmantes, como adelantó este diario, lo más granado del PPCV. Con sus 4.000 avales, Bonig se pone por delante de la dirigente madrileña Cristina Cifuentes, que recopiló 3.700. El andaluz José Manuel Moreno llegó a 9.000.

El exdirigente de Nuevas Generaciones, José Luis Bayo, el único que manifestó públicamente su intención de pelear, ha intentado, sin conseguirlo, que Bonig lo integre en su ejecutiva. En principio, a lo largo de la semana pasada recogió los avales necesarios, pero a fecha del cierre de esta edición no los había presentado ante el comité organizador del congreso (COC). Lo más probable es que lo haga hoy.

La movilización de la militancia en un partido que presume de tener 150.000 afiliados era uno de los retos con los que se enfrentaba la cúpula regional, que había peleado por conseguir la fórmula un militante, un voto; a sabiendas de que la partipación podría ser su talón de Aquiles. Aunque el COC regional no dará los datos oficiales hasta mañana, las fuentes consultadas apuntan que díficilmente se logrará que el 3% del censo; es decir, que en torno a los 5.000 militantes, se incriban. En Alicante lo habían hecho hasta el lunes unos 2.500, por debajo de la movilización en la provincia de València, con menos afiliados. Para el PPCV, sin embargo, el «pinchazo» es relativo. Entre 4.000 y 5000 personas es una cantidad pequeña si se compara, indican, con el censo; pero digno si se compara con el número de delegados que eligieron a Alberto Fabra en el congreso de Alicante o a Francisco Camps en el de Castelló. Además, el PPCV utiliza un argumento incuestionable y es que,al menos internamente, los bases no podrán reprochar a Bonig que no haya dado opción a participar.

Con todo, en las sedes de las direcciones provinciales el teléfono ayer echaba humo. Aunque muchas incripciones han llegado durante le fin de semana y el recuento estaba a medias, el partido intentó apurar las últimas horas para aumentar la participación. Si la referencia son otros partidos, hay de todo: Rivera sólo logró el voto telemático de 5.0000 militantes en toda España. El récord lo tiene el presidente Puig en sus primarias, con 32.000 votos, pero el censo incluía simpatizantes.