Frases como "Está resucitando Franco, dentro de poco le hacen santo", y gritos de "Vergüenza","Fuera, fuera" y de "Fascistas", dirigidos al Partido Popular, cuyo recurso ante un juzgado de Alicante ha forzado la reposición provisional de las calles franquistas.

Todo esto y más es lo que se ha vivido durante la retirada de la primera placa de acuerdo al calendario fijado ayer por el PSOE y Compromís (Guanyar, tercer socio de gobierno, se ausentó de la reunión) para acatar el mandato judicial. El acto ha sido en la plaza de la de la Igualdad, que vuelve a ser División Azul.

La elección de esta plaza no ha sido casual ya que con ella el tripartito quería significar su desacuerdo con una decisión judicial que, según denuncian, les obliga a incumplir la Ley de Memoria Histórica. Han sido unos minutos muy tensos de ambiente crispado en los que se ha dejado notar la presencia de grupos republicanos protestando contra la vuelta de placas franquistas.

La edil de Compromís María José Espuch, responsable precisamente de Memoria Histórica, no ha podido aguantar la emoción y ha llorado sin esconderse, según ha explicado, por la rabia que le produce tener que acatar un mandato judicial de tiempos "del No Do y del blanco y negro. Hasta Cuéntame nos ha superado porque retrocedemos 40 años".

Los otros grupos del tripartito PSOE y Guanyar han dejado sola Espuch en este acto. No ha estado el alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, ni Natxo Bellido, de Compromís, portavoz del equipo de gobierno, y tampoco el vicealcalde Miguel Angel Pavón, de Guanyar, ni nadie de este grupo que se mostraba partidario de agotar todos los plazos legales incluso recurriendo al Tribunal Supremo antes de cambiar las placas para retornar a las fascistas.

Sí que han acudido la diputada de Compromís Mireia Mollà, y por Guanyar, EU y la comisión de Memoria Histórica Fernández Cabello, quien ha acusado al alcalde socialista de timorato por no haber agotado el procedimiento antes de ordenar por decreto la reposición de las placas franquistas.

El presidente de la asociación de vecinos del barrio Miguel Hernández, antes José Antonio Sol d'Alacant, Lisardo Gabarre, ha aprovechado el acto para reivindicar mejoras para la zona, que califica de muy degradada, independientemente del conflicto de las placas. Los vecinos de este barrio se movilizaron en contra de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica y solicitaron que se mantuviera el nombre de Barrio José Antonioo.