Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Administración

El Consell prevé fijar que los altos cargos puedan intervenir en castellano

Puig insiste en que los ciudadanos han de poder usar las dos lenguas por igual en la Administración, pero pide lograrlo con diálogo y sin conflicto

Puig, ayer, entre «su» «ninot» y el que representa a Mónica Oltra, en Na Jordana. m. a. montesinos

«Las autoridades y los cargos directivos de la Administración de la Generalitat en las intervenciones públicas que hagan por razón del cargo han de utilizar el valenciano». El entrecomillado es el artículo 27 del proyecto de decreto de usos de las lenguas oficiales elaborado por la Conselleria de Educación y Cultura.

En opinión del Consell Jurídic Consultiu (CJC), se trata de «una imposición» a personas físicas, algo rechazado por el Tribunal Supremo desde 1999. Por ello, indica en su dictamen sobre esta norma, adelantado por Levante-EMV el pasado miércoles, que debe suprimirse para ajustarse a la legalidad, «implique o no la redacción del precepto la exclusión del uso del castellano» (el departamento de Vicent Marzà consideraba que no).

¿Qué hará ahora la dirección general de Política Lingüística de la Conselleria de Educación? Asegura que cambiará la redacción «en coherencia con el resto del decreto», pero no precisa hasta dónde llegará, porque aún no se ha puesto a la reelaboración del documento en función de las «observaciones esenciales» (desajustes con el ordenamiento legal) formuladas por el Jurídic.

En otros departamentos del Consell se da por hecho que el párrafo será eliminado o se introducirá una coletilla para explicitar que los cargos públicos podrán expresarse en público en castellano, aunque la lengua recomendada sea el valenciano.

En esa línea apuntaba la alegación que presentó la vicepresidencia del Consell (Mónica Oltra, también de Compromís): que las comparecencias públicas «tendrán que hacerse de forma normal y general en valenciano, sin que sea necesario expresarse preferentemente» en esta lengua. Política Lingüística optó, sin embargo, por mantener su criterio inicial, al considerar que no era excluyente, pese a no hacer referencia al uso del castellano.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se pronunció ayer sobre la polémica y, sin cuestionar los fines de la Conselleria de Educación y Cultura, sí abogó por sacar el idioma autóctono de cualquier zona de conflicto. «El objetivo final es que todos los ciudadanos puedan expresarse en valenciano o en castellano. Que las dos lenguas sean conocidas y queridas», afirmó a preguntas de este diario.

Y, para alcanzarlo, «siempre hay que dialogar». «No queremos que la lengua sea nunca un conflicto, pero no se puede amar lo que no se conoce», apostilló.

Las palabras del jefe del Consell pueden interpretarse como un cierto toque de atención a las formas cómo Educación está llevando a cabo la extensión del uso valenciano en la Administración, objetivo compartido plenamente.

«Los ciudadanos tienen derecho a usar cualquiera de las dos lenguas, ese es el objetivo en la administración y en la educación. En esta queremos que al final sepan castellano, valenciano e inglés. Hoy saben castellano, pero muchos no saben valenciano y casi ninguno inglés. Eso es lo que hemos de conseguir cambiar, siempre desde el diálogo», afirmó.

Compartir el artículo

stats