El consejo rector de la nueva radiotelevisión valenciana debatirá en su reunión de hoy una propuesta para acortar un paso más la distancia entre el fundido a negro existente a día de hoy y el comienzo definitivo de las emisiones. Este nuevo proceso es la contratación del personal necesario para poner en marcha la cadena (de carácter más administrativo y técnico, no se trata de la plantilla de periodistas). Se calcula que serán entre 40 y 60 empleados, según detallaron fuentes consultadas a Levante-EMV.
Los nuevos trabajadores de À., el nombre que ha recibido el servicio público tras la celebración de un concurso, accederán a al puesto a través de una bolsa de empleo en la que sumará puntos haber sido empleado de la antigua Radio Televisió Valenciana (RTVV).
Así está establecido en la disposición transitoria novena de la ley que aprobó las Corts el pasado mes de julio. Según esta norma, corresponde al consejo rector, a propuesta de la dirección general, determinar el número y los criterios para la contratación excepcional de personal, como es el caso. Además, por las necesidades de agilidad en la puesta en marcha, se valorará como mérito diferenciado haber trabajado en la antigua RTVV, la antigüedad y haber accedido al puesto mediante proceso selectivo.
Las fuentes consultadas señalaron además que se trata de contratos temporales y que la propuesta podría sufrir alguna variación durante el debate de la misma en el seno del consejo rector, reunión que tendrá lugar hoy en las instalaciones de Burjassot de la antigua Canal 9.
Personal técnico
La proposición que se llevará a la mesa de los nueve miembros del consejo debe incluir una relación detallada de cada uno de los puestos que se requerirán para esta fase inicial de la radiotelevisión. Entre los perfiles demandados se encontrarán previsiblemente técnicos de comunicación (para llevar las relaciones de la cadena con la prensa, funciones que hasta ahora asumen desde la Generalitat), juristas para perfilar los aspectos a pulir y para realizar los primeros contratos con productoras, y personal técnico y administrativo para poner en marcha el engranaje de una radiotelevisión que se prevé que tenga 500 trabajadores y dos canales. También hará falta técnicos para poner a punto el equipo audiovisual, que lleva más de tres años parado. Hasta ayer por la tarde se debatían los flecos de esta bolsa con los sindicatos, según las mismas fuentes.
Además, la directora general Empar Marco, cuyo nombramiento ya ha sido recogido de manera oficial en el DOGV, llevará un informe para explicar los pasos que ha dado hasta el momento, y el consejo deberá decidir si se une al debate sobre el nuevo nombre y lo revierte, como ha pedido el PP, o si respalda la nueva marca elegida por el propio consejo hace apenas dos semanas.
