El hasta ahora jefe de la base de la OTAN en Bétera, el teniente general Francisco Javier Salas, fue nombrado ayer por el Consejo de Ministros nuevo Jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra. Trece meses después de haber llegado a València, el inquilino de Capitanía General pasa a un destino de gran relevancia castrense tras la reordenación de la cúpula militar que ha planificado la nueva ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal.

El traslado de Varela Salas al frente del Ejército de Tierra tiene lugar después de un año al mando de Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad de la OTAN. En este tiempo, corto pero intenso para la base de Bétera, el cuartel multinacional ha impulsado la constitución de la Fuerza Conjunta de Alta Disponibilidad de la Alianza Atlántica. Se trata de un equipo multinacional capaz de desplegarse en cuestión de días en cualquier lugar del mundo para hacer frente a toda amenaza para la seguridad euroatlántica.

Sucesor en el cargo de Rafael Comas, durante sus trece meses al frente del cuartel general de Bétera, la base valenciana ha pasado de tener representados a ocho países a sumar dos más (Polonia y Reino Unido) y alcanzar la cifra de diez Estados, más España, con militares desplegados. Bajo su mando, Bétera ha traspasado al Reino Unido el mando terrestre de la Fuerza de Respuesta de Muy Alta Disponibilidad de la Alianza Atlántica. Al ceder el testigo, el secretario general de la OTAN alabó al cuartel valenciano por un «profesionalismo y dedicación ejemplares». Es difícil entender este último cargo de responsabilidad sin la trayectoria del cuartel general de Bétera en este periodo crítico para la base.

Nacido en 1952, Varela Salas iba a pasar a la reserva en pocos meses. Ahora, en cambio, sus planes se alteran. Su visión europeísta cobra relevancia en alguno de sus escritos recientes, como cuando aseguró que «una Unión Europea más comprometida en defensa, en estrecha colaboración con la OTAN, consigue una Europa más segura y con más capacidades para hacer frente a las amenazas».