El exportavoz de Ciudadanos en Les Corts Valencianes Alexis Marí no se plantea de momento dejar el grupo parlamentario, aunque advierte: "No voy cambiar mi perfil ni a engañar a la gente desde el punto de vista programático", por lo que votará "en conciencia" para cumplir lo prometido al electorado.

En una entrevista casi dos semanas después de su destitución como portavoz, reconoce que Ciudadanos no pasa por sus mejores momentos, con un grupo parlamentario dividido de forma "clara y concisa" entre quienes piensan que hay que actuar de una manera o de otra totalmente distinta.

Considera necesario "estudiar y analizar los porqués" de esa situación y augura un "resultado fatídico" si "en vez de intentar paliar ese tipo de situaciones con paracetamol se quiere aplicar quimioterapia".

Marí afirma no estar preocupado por su futuro, que ahora pasa por asumir sus nuevas responsabilidades como portavoz de las comisiones de Reglamento y Participación Ciudadana y vocal de las de Medio Ambiente y Asuntos Sociales, "de la mejor forma posible".

Tampoco le preocupa la posibilidad de ser apartado del grupo: "Estoy más preocupado por mi perro Sarkozy, que tiene el ojito mal, que por que me aparten del grupo" o porque alguien pueda tomar una decisión, a su juicio, "del todo inmerecida", afirma para reivindicar que siempre ha hecho las críticas donde tenía que hacerlas.

"Hay cosas que obviamente tengo que aceptar como no puede ser de otra manera dentro del grupo, pero hay que distinguir la obediencia debida con el 'sibwanismo' y con la gente que únicamente se dedica a dar palmas", señala.

Afirma que a esa parte de la política no se apunta ni se apuntará y ha advertido de que si hay cuestiones "que se alejan claramente" de lo que el partido trasladó a los ciudadanos durante la campaña electoral del 25 de mayo, votará "en conciencia" en Les Corts aunque ello implique romper la disciplina de voto.

Marí, quien en los últimos meses se ha mostrado muy crítico con la dirección nacional de Ciudadanos, explica que el punto de inflexión para decidir su futuro en el partido, y el de aquellos diputados que le apoyan (David de Miguel, Alberto García, Domingo Rojo y Antonio Woodward), serán los Presupuestos Generales del Estado.

Si Ciudadanos "rompe" su defensa de "la igualdad y la solidaridad entre todos los españoles" y acepta "lo infumable del Cupo Vasco y el concierto navarro" por "un interés partidista", se perdería a su juicio "la identificación con la marca que uno creía que defendía".

Seguirá "muy de cerca" lo que defienden los diputados valencianos de Cs en el Congreso para ver "cómo son capaces de explicarnos esto, si finalmente votan a favor" de los Presupuestos, aunque espera que "no se pulse el botón del sí" a estas cuentas.

Critica que el partido haya decidido "girar el timón hacia la derecha" y lamenta que quienes se acostaron socialdemócratas o progresistas hayan amanecido liberales e incluso "ultralibrerales" o en "un ambiente de conservadurismo que era rarísimo ofrecer desde Ciudadanos".

Alexis Marí afirma tener "la conciencia tranquila" y defiende su gestión al frente del grupo, pues considera que ha hecho una oposición dura al Consell y también al PP, pues, en su opinión, "hay que hacer oposición a las malas políticas en general", y no le gusta la política de atrincherarse y "solo tirar piedras al Consell".

Recuerda que el manifiesto en contra de los presupuestos, que desencadenó su destitución el pasado 24 de abril, estaba visado y aprobado por la dirección nacional del partido, aunque reconoce que él sabía que iba a ser "un problema insalvable" y supondría "un palo importante" que le impediría avanzar.

El partido, critica, "ha ido fumigando todo lo que no gustaba" y está seguro de que su destitución es un aviso de "cuidado, quien pase esta línea sabe que va a recibir palo", un mensaje que ve "rancio" y "poco apropiado" para un partido que se hace llamar regeneracionista.