La dirección del Centro de Menores "Nuestra Señora de la Resurrección" de Segorbe denunciará a la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, al entender que ha podido vulnerar los derechos al honor, la intimidad y la propia imagen del centro con sus declaraciones públicas en las Corts.

Las hermanas Terciarias Capuchinas que gestionan el centro trasladarán además a la Fiscalía la intervención íntegra de Oltra de ayer en el pleno del Parlamento autonómico por si en ella se hubiera vulnerado "los derechos de los menores aludidos o de los trabajadores del centro igualmente mencionados".

La también consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas aseguró ayer, entre otras cosas, que en el centro de Segorbe se despidió a un tutor por suministrar droga y por supuesto abuso sexual a una menor, además de existir denuncias por duchas frías y falta de productos de higiene y de comida.

Hoy, la directora de Nuestra Señora de la Resurrección, Concha García, y la representante de las Terciarias Capuchinas Regina del Peral han anunciado esa próxima medida contra Oltra en una jornada donde el centro ha abierto sus puertas para que tanto medios de comunicación como vecinos pudieran visitar las instalaciones tras las recientes denuncias de la Generalitat, tanto de este centro como el de Monteolivete.

Del Peral ha mostrado su voluntad de que esta situación "se solucione" y puedan recuperar "la relación con la Administración", además de que los menores "vuelvan al centro", por lo que recurrirán administrativamente la resolución de traslado ordenada desde la Conselleria.

También abrirán la vía contencioso-administrativa para "recurrir las resoluciones expresas y tácitas de la Dirección General de la Infancia y la Adolescencia que determinan la reubicación de los menores".

Decenas de vecinos de Segorbe han acudido hoy al centro en esta jornada de puertas abiertas, donde la dirección quería dar a conocer la situación en que se encuentran las instalaciones después del traslado de los dieciocho menores que residían en ellas el pasado 9 de mayo tras la detección de anomalías, según informó entonces Oltra.

Antes incluso de las diez de la mañana, hora prevista de la convocatoria, varios vecinos esperaban a las puertas del centro, al que han ido accediendo guiados por alguno de sus diecisiete trabajadores, visiblemente afectados.

Los visitantes coincidían en la amplitud, la limpieza, el orden y la "apariencia de hogar" de las instalaciones en las que convivían niños y adolescentes de entre 8 y 17 años, concretamente diez chicas y ocho chicos.

Durante la rueda de prensa, Regina del Peral ha explicado que el centro lleva 120 años trabajando con menores en situación de riesgo y exclusión y su máximo interés es "que los niños vuelvan", porque su "vocación son los menores y su fin, el supremo interés de los niños".

Uno de los educadores, David Pérez, ha explicado entre lágrimas que "ofrecen a los menores lo mejor" y con métodos y recursos para atender las ocasiones excepcionales.

Del Peral se ha referido a las declaraciones de Oltra sobre un supuesto caso de abuso sexual "tapado" por el centro para asegurar que afectaba a una menor de 17 años y a uno de los trabajadores, que intercambiaron mensajes de teléfono pero "en periodo vacacional", ha indicado, cuando la menor estaba bajo la custodia de sus padres.

Cuando tuvieron conocimiento de los hechos, según Del Peral, "se decidió despedir al trabajador por conducta inapropiada", aunque "no se pudo observar conducta penalmente relevante".

También ha explicado que los otros dos expedientes abiertos al mismo trabajador de 2010 y 2014 no tienen relación con este último.