El Consell ha aprobado el Programa Anual de Controles Financieros Específicos para 2017, que incluye revisiones sobre los centros docentes públicos y privados concertados, el Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana y el Registro Unificado de Facturas (RUF) de la Generalitat.

Estas tareas de auditoría pública tienen como objetivo aumentar el control de la gestión económica y financiera del sector público de la Generalitat para poder detectar cualquier error que pueda surgir en la administración de alguno de estos centros y organismos.

Así lo ha dado a conocer la vicepresidenta del Gobierno valenciano, Mónica Oltra, en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, en el que también se ha informado del control realizado sobre el Registro Único de Facturas elaborado por la Intervención General, correspondiente al ejercicio 2016.

Según este informe, la Conselleria de Hacienda ha contabilizado a lo largo del pasado ejercicio el 90,77 % de las facturas pendientes del RUF desde 2012 a 2015. Se trata de 76.522 facturas por importe de 346,24 millones, cuya aplicación estaba pendiente de resolver o bien de darse de baja.

El control financiero específico de los centros docentes públicos no universitarios se realizará sobre la gestión económica del ejercicio 2016 y tiene como finalidad comprobar la situación y el funcionamiento económico de este tipo de centros dependientes de la Generalitat.

En cuanto a los centros educativos privados concertados, el trabajo se centrará en los mecanismos y procedimientos establecidos para el control de los gastos de funcionamiento, pagos de nóminas y la gestión de las becas de comedor del curso escolar 2016/2017.

Desde la Generalitat han recordado que este control de carácter financiero sobre los centros concertados viene obligado desde la orden de 26 de diciembre de 2008 y, posteriormente, la Orden 7/2013, de 30 de enero, ambas reguladoras de los conciertos educativos, y se realiza todos los años desde 2013.

Sobre el Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana, la solicitud se debe al cambio en la dirección de la entidad y tiene como objetivo conocer con exactitud su situación económica, por lo que el control se realizará sobre las actuaciones realizadas por el organismo entre los ejercicios 2012 y 2015.

En cuanto al control financiero específico del RUF de la Generalitat, se revisará toda la información anotada en el mismo hasta el 31 de diciembre de 2016, y tiene como objetivo comprobar que las facturas inscritas en dicho registro corresponden a obligaciones reales de pago y que toda la información está completa y es correcta.

Por otra parte, el Consell ha conocido el informe definitivo de control financiero específico sobre el Registro de Facturas de la Generalitat de 2016, según el cual, entre diciembre de 2014 y septiembre de 2016 hay una reducción 514 millones de euros de las facturas pendientes de aplicar al presupuesto.

El Informe de la Intervención pone de manifiesto que el área de Sanidad es la sección que más volumen de facturas ha resuelto, con un 93,54 % del total.

En cifras absolutas, las facturas resueltas por el área de Sanidad se elevan a 71.792 de un total de 76.522 y su importe se eleva a 299,4 millones.

Respecto al resto de departamentos, la mayoría tiene resuelto entre el 71 % y el 87 % de sus facturas pendientes, lo que puede considerarse como correcto.

En la valoración global del informe se revela que se ha consolidado el medio electrónico como el habitual para la emisión y presentación de las facturas, y que el elevado porcentaje de facturación electrónica, superior al 90 %, conlleva la disminución de las facturas manuales tradicionales a mínimos.

También se destaca el hecho de que se aprecia una mejoría en cuanto a la minoración del plazo medio de gestión que ha pasado de 182 días a 92.