La doctora en Física Susana Marcos Celestino (Salamanca, 1970), directora del Laboratorio de Óptica Visual y Biofotónica del Instituto de Óptica que el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) tiene en Madrid, está en la punta de lanza europea de la investigación en Física de la visión. Sus 16 patentes han generado innovaciones de gran impacto en empresas oftálmicas para la mejora del diagnóstico y tratamiento de patologías oculares.

Esta investigadora ya ha hecho historia al recibir la primera Advanced Grant, la beca de más alto nivel que otorga la UE, que el Consejo Europeo de Investigación (ERC) concede en el área de la visión. Este proyecto que ya está en el último de sus seis años ha recibido una financiación del ERC de 3,5 millones para desarrollar la tecnología para combatir la presbicia o vista cansada, que es la pérdida de capacidad del cristalino del ojo para enfocar a partir de los 45 años.

La presbicia afecta al 44 % de la población europea, unos 209 millones de personas. Marcos lidera un equipo multidisciplinar de 20 investigadores que desarrolla tecnología para poder entender los mecanismos de la acomodación y la multifocalidad con el fin de crear una lente intraocular que emule las propiedades de acomodación del ojo joven.

El Jaime I de Nuevas Tecnologías es «un apoyo y un reconocimiento a mi esfuerzo y el de todo mi equipo transferir a la sociedad la ciencia de frontera que realizamos en el laboratorio sobre diagnóstico y corrección del ojo», subraya la investigadora.

Su trabajo también tiene una clara vocación social pues, en colaboración con el Massachusetts Institute of Technology (MIT) de Boston, ha desarrollado un sistema portátil de bajo coste para medir la refracción del ojo en el que basta apretar un botón para saber cuál es la gafa más adecuada para cada persona. Este dispositivo ya se ha introducido en países del Tercer Mundo. «El proporcionar unas gafas a quien no las tiene aumenta su calidad de vida y su producción y le puede sacar de la pobreza», destaca.