El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, visita hoy València para reunirse con la Autoridad Portuaria y firmar el convenio que permitirá la inversión de 53 millones de euros del Puerto de València en la mejora de la línea de ferrocarril que une las ciudades de Sagunt, Teruel y Zaragoza.

Se daba la circunstancia de que la gestora del puerto valenciano no tenía permiso para llevar a cabo este gasto millonario puesto que existía un bloqueo por parte del Ministerio de Hacienda para llevarlo a cabo.

Ahora, con la firma de este convenio, los 53 millones que tiene previsto invertir Puerto de València se destinarán a la creación de apartaderos de 750 metros en la línea para mejorar el tránsito de los trenes de mercancías, y a la puesta a punto de varios de los tramos de vía que presentan importantes problemas.

Ésta es una reivindicación histórica por parte de la Autoridad Portuaria puesto que Zaragoza es un nudo logístico de gran importancia a nivel nacional y en ocasiones, para que las mercancías llegasen a la dársena valenciana, debían dar auténticos rodeos por otras capitales para evitar tramos inundables o incluso zonas en las que existía el riesgo de que los trenes «patinaran» por el estado del trazado.

El puerto de València llegó a tildar de «impresentables» algunas de las zonas del recorrido del tren Sagunt-Teruel-Zaragoza y reclamaba la puesta a punto de la infraestructura dados los intereses empresariales y económicos que dependen de esta línea.

A los 53 millones que aportará el puerto valenciano se suman los casi 300 millones que invertirá Adif para la adaptación de todo el trayecto del tren.

A la firma, que se llevará a cabo en la Sala de los Mosaicos de la estación València Nord, está previsto que, además del ministro del Interior, acuda el presidente de la Autoridad Portuaria, Aurelio Martínez.

Por otra parte, durante su estancia en la Comunitat, De la Serna asistirá a la inauguración del tramo de la variante de la Font de la Figuera de la autovía A-33.

Tal y como ya informó este periódico anteriormente, la apertura solo afecta a la mitad del recorrido de esta variante cuyas obras debieron haber finalizado en el año 2012 pero que, según la última programación reflejada en los Presupuestos Generales del Estado, no estará disponible hasta el año 2020.

La apertura de este tramo de vía evitará que el tráfico transite por dentro de la localidad valenciana. Afecta a un tramo de unos 6,5 kilómetros de recorrido que van desde el enlace con la A-35 hasta conectar con la N-344, una vez superado el núcleo urbano de la Font de la Figuera.