El plan de choque de Renfe para incorporar nuevos maquinistas a su plantilla y evitar que se repitan las cancelaciones de servicios en el núcleo de Cercanías de Valencia que se están produciendo en las últimas semanas, tal como ha venido denunciando Levante-EMV, podría tardar «meses» en estar operativo.

Sin embargo, fuentes de Renfe aseguran que solo con la incorporación paulatina de los maquinistas que han estado con bajas laborales será posible revertir la situación actual sin esperar a la plena incorporación de los que han sido contratados recientemente. «Estamos en una línea de mejora y esta misma semana podrían desaparecer los problemas», dijeron.

Sin embargo, ayer se produjeron otras 9 cancelaciones que afectaron a las líneas de Cercanías C-6, C-3, C-2 y C-1 sobre un total de 356 circulaciones programadas, según resaltaron en la compañía ferroviaria.

A estas supresiones hay que sumar las de los servicios de la línea C-4, entre la estación de Sant Isidre y Xirivella. Fuentes de Renfe aseguraron que la cancelación de servicios en esta línea no está relacionada con la falta de maquinistas sino con la ausencia de viajeros. Según explican, en esta línea de algo menos de dos kilómetros, se utiliza un servicio de taxi cuando alguien compra un billete. «Hay muchos días que la línea no tiene usuarios», dijeron. Para mañana ya se han anunciado en la página web de Renfe y en su cuenta de Twitter cinco cancelaciones entre las 6.00 y las 9.00 horas.

Plan de choque

Renfe ha anunciado la incorporación de 30 maquinistas para normalizar el servicio de Cercanías en la Comunitat Valenciana, según anunció el domingo el director de Servicio Público-Viajeros de la red nacional de trenes, Manuel Pedrosa, que reiteró sus «disculpas a los viajeros afectados».

El servicio de ferrocarriles ha gestionado siete incorporaciones urgentes, que se suman a un proceso de ampliación de 23 maquinistas. Estos agentes de conducción «se encuentran en la actualidad en diferentes etapas del proceso de formación que requieren para adaptarse a los vehículos a la red y a las líneas», según admite la compañía. De los siete, algunos todavía están de prácticas con simuladores o viajan como ayudantes en convoyes con un maquinista titular para aprender.

El grupo de 23 aún tiene que pasar por una formación que puede requerir hasta de cuatro meses. Renfe dijo ayer que esos 23 maquinistas «operarán a partir de julio» en referencia a que ya estarán en el proceso de formación.

Con estos 30 nuevos maquinistas, Pedrosa aseguró que la red de cercanías de Valencia no debería tener «más problemas» y que la situación podrá solucionarse «en breve», aunque no descartó nuevas incorporaciones.

Pedrosa aseguró a la agencia Efe que detrás de la crisis de maquinistas hay un «un cúmulo de circunstancias» que han coincidido en el tiempo: principalmente, bajas por enfermedad común y casos en los que los empleados han sido declarados como no aptos por no superar los reconocimientos psicotécnicos «bastante estrictos» a los que se han de someter anualmente. Las jubilaciones también han provocado un descenso del número de maquinistas disponibles y están previstas 25 más en breve plazo de tiempo.