Pedro Sánchez subió a la mesa del Congreso federal como secretario de actas al alcalde de Burjassot, Rafa García (1971), que desde hoy disputará la secretaría general al presidente Ximo Puig en las primarias para hacerse con el control del PSPV. La estrategia de la nueva dirección de Ferraz, con el valenciano José Luis Ábalos en Organización, estaba diseñada para poner el foco valenciano en este joven valor que siempre apostó por el «no» al PP de Rajoy y por respaldar al reelegido líder del PSOE, al que le organizó un mitin multitudinario en el municipio de l´Horta el mismo día que su rival andaluza Susana Díaz presentaba en Madrid su candidatura a las primarias. Sánchez le ha devuelto el apoyo lanzándolo a la carrera de Blanqueries.

García es alcalde desde el 7 de junio de 2014 cuando recibió la vara de mando del hoy eurodiputado valencianista Jordi Sebastià, gracias a un pacto de izquierdas entre PSPV, Compromís y EU para que el Partido Popular no accediera a la alcaldía tras ganar las elecciones de 2011. A García, también secretario general de la agrupación local que sustituyó en el liderazgo socialista al histórico Chavarrías, no le importó esperar tres años para ostentar la alcaldía en los últimos 12 meses de mandato. Es un alcalde tranquilo, paciente, que venció por minoría en los comicios de 2015.

Licenciado en Historia del Arte, casado con dos hijos y amante de los gatos, el alcalde empezó muy joven en la política local y comarcal, llegando a ser secretario de Organización del PSPV provincial con Jorge Alarte como líder de Blanqueries. Fue el elegido por Chavarrías y su mano derecha José Ruiz -negociador de Ábalos frente a Puig-, que lo formaron como asesor y responsable de la empresa pública para la renovación en Burjassot. Una regeneración que ahora quieren para el PSPV, pues piensan que Puig debe dedicarse al Consell.

En su toma de posesión manifestó que su prioridad era «escuchar a los vecinos y hacer de Burjassot un referente cultural y social». García es muy activo en las redes sociales -cuenta con más de 6.200 amigos en Facebook- y mantiene un contacto directo con sus conciudadanos, con los que toma café en sus casas para escuchar sus quejas y peticiones, en su iniciativa «Alcalde a Domicilio». De los primeros en apostar por Sánchez, ahora quiere trasladar a la Comunitat la «ola de ilusión» que ha generado su líder en la militancia.