Cuando el cartel luminoso de la campaña electoral aparece, se encienden también otros avisos. Los de medir el mensaje o los de decidir la composición de una foto, por ejemplo. Eso lo tiene claro cualquier candidato en un proceso de este tipo. En el caso de los políticos valencianos, son conscientes además de que la relación con Madrid es uno de los puntos clave. Se vio en la reciente campaña de primarias de Podemos, donde finalmente salió elegido Antonio Estañ, el candidato que no se alineaba con ninguno de los dos líderes visibles estatales, y se está viendo en las primarias socialistas.

Rafa García insistió ayer en una entrevista en el programa Última Pàgina, de Levante TV, que la alternativa que ha presentado a la candidatura de Ximo Puig no viene impuesta por la dirección estatal que recae en manos de Pedro Sánchez. "Soy yo personalmente el que decide dar el paso. Tengo buena relación con Sánchez y amistad con Ábalos, pero el visto bueno a mi candidatura lo da mi familia", indicó el también alcalde de Burjassot. "Al fin y al cabo, cuando te presentas a un cargo así, al final estás solo", añadió el precandidato (todavía tienen que conseguir los avales).

García desechó la idea de que su candidatura fuera una "vendetta" perpetrada por el líder estatal contra Puig, por haber contribuido este último a su derrocamiento el pasado mes de octubre. Además, insistió en la idea de la bicefalia: "el gobierno comporta muchos esfuerzos y se desatiende al partido". Sin embargo, preguntado sobre la posibilidad de que Pedro Sánchez llegue a la presidencia del gobierno también debería dejar la secretaria general del PSOE, García apuntó que «habría que verlo» y supeditó la decisión a la consecución de una mayoría absoluta. En el caso de Puig también. «Si se alcanza la mayoría absoluta se podría plantear», dijo.

El alcalde de Burjassot planteó su campaña en términos similares a los de Sánchez: "tenemos que aprovechar la ola de ilusión de la militancia", explicó. Para ello, pretende recorrer todo el territorio y recoger propuestas de los afiliados a través de una página web que se pondrá hoy en funcionamiento.

El futuro de los 'barones'

Por su parte, el portavoz de la Ejecutiva socialista, Óscar Puente, advirtió ayer que el papel de los llamados 'barones' y su perspectiva de futuro dependerá de "su capacidad de adaptación" a la nueva dirección del PSOE. Puente añadió que en muchas autonomías "los militantes han llevado la contraria a los líderes territoriales", en clara alusión a lo ocurrido en la C. Valenciana con Ximo Puig, quien apoyó a Susana Díaz.

En este sentido, defendió el nuevo modelo organizativo del PSOE, que deja atrás las baronías regionales para ser "más horizontal". "Son los militantes los que han tomado el control: sí en Valencia o Aragón surgen candidaturas alternativas, ellos decidirán", señaló, al tiempo que garantizó que la dirección socialista van a mantener una "posición neutral".