La Conselleria de Sanidad pactará junto con los trabajadores de ambulancias nuevos protocolos que marquen un mínimo de recursos humanos y asistenciales a la hora del traslado de enfermos infecto-contagiosos, psiquiátricos o presos. Así lo desveló ayer Javier Molina, coordinador de Transporte Sanitario del sindicato UGT. Este primer paso para sentarse a una misma mesa y negociar sobre estos traslados -junto a los avances en la negociación del convenio colectivo con las empresas- fueron ayer las razones que llevaron al sindicato a desconvocar a primera hora de la tarde la huelga de trabajadores de ambulancia anunciada por la mañana.

El paro, al que se convocaba a 1.500 empleados, se había fijado para toda la próxima semana «tras la imposibilidad de llevar a buen término una negociación del convenio colectivo autonómico justo y ante la intransigencia de la Conselleria de Sanidad de incluir cláusulas sociales en el concierto de ambulancias que lo aseguren», aseguraban ayer por la mañana desde UGT. Sin embargo, y después de mantener una reunión entre trabajadores y empresas en el Tribunal de Arbitraje Laboral (TAL), se decidió desconvocar la huelga ya que las empresas (con las que la administración mantiene un concierto que ahora está pendiente de renovar), aceptaron abrir de nuevo la mesa de negociación del convenio colectivo.

«Se ha fijado la fecha del día 12 de julio», anunció Molina que además mantuvo que la negociación partiría de la base salarial del convenio autonómico «y se recuperan tanto la antigüedad como otros conceptos».

Desde UGT, que también recriminaban a conselleria que no se obligara a las empresas a cumplir con ciertas mínimos sociales a través del concierto, aseguraron que el compromiso de redactar los nuevos protocolos de traslado era un paso «pero tendremos que ver los resultados», abundó Molina. Los trabajadores se han quejado en numerosas ocasiones por los problemas sobrevenidos en el traslado, por ejemplo de presos.