Un selfi provocó el descuido que le hizo a una niña de 12 años caer el pasado lunes en un silo de 10 metros de profundidad en Riba-roja de Túria, tras lo que tuvo que ser rescatada por efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos. Así lo revelaron ayer fuentes del cuerpo, un día después de que la pequeña fuera trasladada al hospital La Fe de València, donde la han tratado de las múltiples fracturas provocadas por la caída.

Al parecer, según indicaron los bomberos, la menor habría entrado el pasado lunes por la tarde junto a una amiga en esta cantera situada en las afueras de este municipio del Camp de Túria. Allí habrían estado haciéndose fotos con el teléfono móvil para demostrar que habían visitado el lugar, que se encuentra abandonado. En un descuido, al dar un paso hacia atrás mientras se estaba haciendo un selfi, una de ellas se cayó en el silo, de unos 10 metros de profundidad.

Para poder llevar a cabo el rescate, los bomberos necesitaron facilitar el acceso a los servicios sanitarios del SAMU por un agujero inferior en la instalación, por el que pudieron sacar a la niña. Pese a que la chica sufrió múltiples fracturas, todavía podría haber corrido peor suerte. Los bomberos explicaron que la forma cónica del silo permitió que su cuerpo no cayera directo contra el suelo, sino que fue rebotando por sus paredes. De este modo, la caída se fue amortiguando y se evitó un mal todavía mayor.

Para efectuar las labores de rescate se tuvieron que desplazar 12 efectivos: una bomba urbana pesada (BUP) de l'Eliana, otra BUP y un sargento de Paterna, un oficial de guardia y el Grupo Especial de Rescate en Altura (GERA), además de los servicios sanitarios del SAMU.