El tío del joven marroquí de 24 años detenido hoy en la localidad castellonense de Vinaròs por colaborar supuestamente con la célula yihadista responsable de los atentados de agosto en Cataluña, Hmad Benmarzoor, ha asegurado que su sobrino "no está radicalizado" y es "amable y trabajador".

En declaraciones a los periodistas mientras la Guardia Civil registra esta mañana la vivienda donde reside el detenido, propiedad de Benmarzoor, este ha explicado que el joven es sobrino de su mujer y que lleva casi un año viviendo con ellos y trabajando con él en una carnicería de su propiedad en Vinaròs.

"Es un chico muy amable, no está radicalizado y es muy trabajador", ha apuntado para añadir que no ha visto "nada raro en él" y le tiene "mucha confianza".

"Es imposible que haya hecho esto" de lo que le acusa la investigación de la lucha antiterrorista, según Benmarzoor, quien ha asegurado sin ocultar sus lágrimas: "Últimamente tenemos mucho mas trabajo y no tiene tiempo para esto", a lo que ha añadido: "No sé si alguien le habrá engañado, pero yo no me lo creo".

El operativo policial para la detención del joven marroquí ha empezado a las seis de la mañana y según Benmarzoor, en la vivienda estaban durmiendo también él, su mujer y dos de sus cuatro hijos, y han creído que los agentes "que eran ladrones".

Ha relatado que su sobrino llegó a España de pequeño y estuvo hasta su mayoría de edad en un centro de menores de Barcelona, y tras un tiempo -que no ha especificado- que pasó con un familiar en la capital catalana, hace tres se trasladó a Vinaròs y lleva viviendo y trabajando con ellos desde hace casi un año.

Benmarzoor ha asegurado que su sobrino no tiene antecedentes, que no ha podido hablar con él desde que se ha desarrollado la operación y que durante el operativo le han esposado y le han pedido la documentación hasta comprobar que no era quien iban buscando.

Según ha dicho, su sobrino "no es muy religioso", apenas "rezaba ni nada" y "a lo mejor a veces" iba "a la mezquita".

Su familia, ha relatado este hombre, se desplazó a Marruecos a final de agosto para la fiesta del cordero y el joven se quedó en la vivienda de Vinaròs; desde entonces apenas han coincidido y por esa razón no habían comentado con él los atentados de Cataluña, ha dicho al ser preguntado por los medios.

En el barrio donde se ha producido la operación de la Guardia Civil se agolpan los medios de comunicación y algunos curiosos, mientras los agentes siguen en el domicilio con el joven, según su tío, y han sacado ya varias bolsas con material del interior de la vivienda.

El alcalde de Vinaròs, Enric Pla, se ha desplazado hasta el lugar de los hechos y ha lanzado un mensaje de "calma y tranquilidad" a la población para que siga con "su vida y su trabajo", ha ofrecido "la máxima colaboración" a las fuerzas de seguridad y ha mostrado la "más enérgica repulsa" del pueblo a los que usan la violencia para solucionar sus diferencias.

Pla ha instado a la población a fomentar y "seguir construyendo" una sociedad "con diálogo y convivencia en la que todos, por encima de sus diferencias, tengan cabida".