La entidad financiera catalana Caixabank, que ha decidido trasladar su sede a València, cuenta con más de 5.000 oficinas por toda la geografía española, de las que más de 1.300 (el 26% de su red) están en Cataluña, y dispone de unos 9.500 cajeros automáticos. El número de clientes digitales en España supera los 5,5 millones.

Además, la entidad articula su presencia internacional a través de oficinas de representación, sucursales internacionales y acuerdos de colaboración con bancos corresponsales. CaixaBank cuenta con oficinas de representación en Hong Kong, Pekín, Shanghái, París, Milán, Fráncfort, Dubái, Nueva Delhi, Estambul, Singapur, El Cairo, Santiago de Chile, Bogotá, Nueva York, Johannesburgo y Sao Paulo. Además cuenta con sucursales internacionales en Varsovia, Marruecos (con una oficina en Casablanca y otra en Tánger) y Londres.

En la Comunitat Valenciana, CaixaBank mantiene su liderazgo en cuanto a oficinas en la autonomía al convertirse en una de las grandes entidades españolas que incrementó su red en la autonomía en estos últimos años, según los últimos datos del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF). La entidad, que en 2012 se adjudicó el Banco de Valencia por un euro, disponía al cierre de 2016 de 435 sucursales. Entre ellas: 3 centros de banca privada y nueve centros de empresas.

En cuanto a clientes, Caixabank posee alrededor de un millón de clientes en la autonomía, según constatan los últimos datos facilitados por la entidad financiera. En este territorio CaixaBank emplea a 2.100 trabajadores. Un 57,6 % son mujeres. Respecto a la Obra Social, la entidad -que tiene previsto abrir un CaixaForum en l'Àgora de la Ciutat de les Arts i les Ciències- destina unos 28 millones de euros anuales

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el presidente de la Fundación bancaria la Caixa, Isidro Fainé, sellaron en marzo de 2017 el acuerdo para instalar el CaixaForum en l'Àgora. La Fundación la Caixa invertirá 18 millones de euros en su construcción y disfrutará de una concesión que podría rondar los 50 años, sin pagar canon, pero con el compromiso de invertir anualmente cinco millones en actividades y contenidos.