El Juzgado de Instrucción número 9 de València, Miguel Ángel Casañ, ha dictado auto de procesamiento contra el exgerente de Imelsa y exyonki del dinero confesó, Marcos Benavent, por estafa, falsedad y malversación de fondos públicos por un contrato ficticio para la sustitución del alumbrado en Llutxent, por valor de 60.000 euros, que nunca se llegó a ejecutar. En esta misma causa el juez ha decidido archivar la investigación contra el exdirector financiero de Imelsa, José Enrique Montblanch, porque "los contratos menores de 50.000 euros no estaban sometidos a ningún control", según acaba de informar el Tribunal Superior de Jusiticia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

Sí que acompañará a Marcos Benavent en el banquillo el empresario que facturó por estos trabajos ficticios, Vicente Calvo Navarro, aunque éste último reconoció los hechos tras una inspección de Hacienda, y se comprometió a devolver el dinero a Imelsa con intereses, según consta en el auto de procesamiento del Juzgado de Instrucción 9 al que ha tenido acceso Levante-EMV.

El juez considera que tanto Benavent como Calvo "pudieron convenir en llevar a cabo una falsa operación comercial con el fin de obtener un dinero fácilmente un beneficio económico a costa del dinero público que quedó abortado por la actuación de la Hacienda Pública".