El exceso de emisiones de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera es una de las principales causas del inicio del cambio climático. La alta exposición del aire con materiales contaminantes es una lacra con la que la humanidad actúa sobre el planeta Tierra. Este problema, que hizo reaccionar a la comunidad internacional con la creación del Protocolo de Kyoto, necesita de la voluntad de todas las personas para volver a equilibrar el desagravio ambiental, pero la naturaleza tiene su propio método: la fotosíntesis.
Es por ello que una buena masa forestal puede compensar las sobreemisiones que la actividad humana e industrial realiza a diario y la Comunitat Valenciana va a ser pionera con la creación del primer banco nacional de oxígeno gracias a la Fundación Natural Life. El monte de Andilla acogerá el primer "gran sumidero de carbono" que servirá para que pymes, grandes empresas y cualquier ciudadano, puedan resarcir su contaminación por una cantidad de oxígeno ya liberada en la atmósfera.
Y es que desde que se creó el protocolo de Kyoto, los países pueden vender oxígeno a aquellos que se exceden en sus emisiones. En España el proceso existe, pero gran parte de la inversión de las grandes empresas nacionales se va fuera, a otros países, donde por ser el coste de la mano de obra más barata y la capacidad de fijación de CO2 del bosque mucho más alta (por ejemplo, el Amazonas) hacen que el precio del bono de carbono sea mucho más barato, que invertir en España. Además "la tardanza de los trámites burocráticos echan a las empresas hacía atrás", explica Juan Ángel Navarro, director de la fundación. "Lo que pretendemos es ahorrar ese tiempo, teniendo a disposición de cualquiera el oxígeno que necesite, con un solo click", cuenta el propulsor de esta idea.
Para ello, la fundación Natura Life contacta con aquellos que quieran restaurar un terreno y realiza los trabajos gratis para el propietario, a cambio de la cesión de los derechos de emisión de la zona seleccionada. Una vez llegado al acuerdo, la fundación consigue un certificado de buena ejecución de la administración competente, y lo registra en la Oficina Española de Cambio Climático, donde se pueden conseguir los Certificados de Reducción de Emisiones (CRE´s) con los que cualquier usuario puede evitar sanciones administrativas por exceder su emisión de CO2.
"Nosotros actuamos en los bosques de manera preventiva y regenerativa", expone Navarro. "La Administración o el propietario, en la mayoría de los casos no tiene presupuesto para asegurar una buena prevención, convirtiendo nuestros montes en un polvorín, como se demuestra en cada incendio forestal, que vemos todos los años", continúa Juan Ángel. Además, considera ineficaces las repoblaciones masivas cuando se genera un fuego forestal: "Opinamos que son un método más caro y menos efectivo, que actuar directamente sobre la propia regeneración natural que se produce en los primeros años tras un incendio", especifica el director. "Tratamos de llevar al bosque lo antes posible al clímax de pinar adulto, pero aunque realizamos repoblaciones si no queda otra opción, preferimos trabajar con los semilleros naturales, que ya llevan la carga genética (piñones) del pino padre que ha estado siempre ahí, porque está acostumbrado a las condiciones del terreno, para ello retiramos aquellos árboles que han crecido de manera irregular, dejando solo los ejemplares más adecuados, acorde al ideal de densidad de la masa", argumenta Juan Ángel Navarro. Para financiar todos estos procesos, la fundación reinvertirá en la misma causa, la protección del medio ambiente y desarrollo de mundo rural, todo lo que ingrese, en los propios proyectos que practica Natura Life.
La fundación tiene tres líneas de actuación. La de los incendios con acciones preventivas, campañas de concienciación, y colaborando con las administraciones; la creación de vías verdes mediante la regeneración y conservación, la conservación del hábitat y especies, la restauración de sendas, y creación de una red verde de caminos. Por último, la generación de ríos verdes a través de una restauración hidrológica, la consolidación de cauces contra escorrentías, la eliminación de especies invasoras exóticas y la imposición de riberas pobladas con especies autóctonas.Proyecto para 1.000 hectáreas
El aterrizaje en Andilla permitirá a Natura Life restaurar 1.000 hectáreas, aunque empezarán con una experiencia piloto de cien. El motivo por el que se ha escogido este emplazamiento es por el incendio a finales de junio y principios de julio de 2012 que, junto al de Cortes de Pallás, arrasó 48.500 ha. Además del principio de acuerdo con la localidad de Los Serranos, el proyecto ha sido recibido por la directora de prevención de incendios de la Comunitat, Delia Alvarez, y está previsto un convenio de colaboración con la Generalitat, al igual que con sus homólogos murcianos.
