El pasado mes de octubre ha sido el sexto más caluroso desde 1950 en la Comunitat Valenciana, con una media de 18,2ºC, 1,9 por encima de lo normal en la décima hoja del calendario. También ha sido un mes especialmente seco, el segundo octubre en el que menos ha llovido de los últimos 20 años, ya que la precipitación acumulada de 10,8 litros por metro cuadrado se sitúa un 85% por debajo del promedio 1981-2010.

Según el balance de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), se trata del mes de octubre más caluroso desde 2014, que fue extremadamente cálido con una media cercana a los 19 grados. Desde 2011, todos los meses de octubre han sido cálidos o muy cálidos y hay que remontarse a tres años antes para el último gran temporal de levante.

Por zonas, el último octubre ha sido muy seco en la mayoría de la Comunitat Valenciana, hasta el 68% del territorio -casi toda la provincia de Valencia y Castellón- y seco en el 31%, gran parte en Alicante. Solo el 1% de la región ha tenido un carácter climático normal, en zonas del litoral norte alicantino.

El carácter tan cálido y seco se debe a la presencia persistente de altas presiones sobre la Península durante prácticamente todo el mes, con una anomalía de presión media de +5.2 hPa en la Comunitat. Solo en dos ocasiones, en 1971 y 1983, se produjo una situación similar de altas presiones tan potentes en un mes de octubre.

A pesar de las altas temperaturas, la entrada del otoño en la Comunitat se ha caracterizado por la estabilidad, con una bajada desde los más de 19ºC del 1 de octubre hasta los 14 del pasado martes, 31 de octubre. De hecho, salvo los días 7 y 19, los termómetros estuvieron muy por encima de los valores habituales, aunque no se ha registrado en todo el mes un gran pico cálido.

El jueves 5 de octubre fue la jornada más calurosa y se notó especialmente en la provincia de Valencia, con hasta 34,5ºC de máximas en Sumacàrcer, 34 en Barxeta, 33,8 en Carcaixent y 33,4 en Xàtiva. Por contra, los valores más bajos se registraron el lunes 23, cuando Vilafranca del Cid (Castellón) rozó la helada con 0,2ºC y el observatorio de Ademuz (Valencia) marcó 1,3ºC, si bien el día más frío en el conjunto de la región fue el jueves 19.

La anomalía de las temperaturas ha sido más acusada en el interior de la mitad norte de la Comunitat Valenciana, donde hay zonas con diferencias de más de tres grados en el litoral y el régimen de brisas ha suavizado algo las máximas a partir de mediodía.

Las desviaciones más significativas se han registrado en las localidades castellonenses de Morella, Castellfort y Fredes, las valencianas de Utiel y Xàtiva y las alicantinas de Novelda y Villena. Mientras, los termómetros no marcaron diferencias tan acusadas en las tres capitales de provincia: de +1,6ºC en Castellón, +1,4 en València y +0,7 en Alicante.

60 litros por debajo del promedio

En cuanto a las precipitaciones, el balance de la Agencia de Meteorología refleja que en octubre de este año llovió menos de la mitad que en 2015 y 2016, con valores muy similares a los de hace tres años. Desde 2013, todos los meses de octubre han concluido con una precipitación media muy inferior al promedio normal de 71 litros por metro cuadrado.

La tónica general de falta de lluvias se vio interrumpida con las tormentas del 18 de octubre. Aunque fueron generalizadas en toda la región, en la mayoría cayeron en forma de chubascos de forma duración e intensidad puntualmente fuerte. En puntos de Alicante como Altea, estuvieron acompañadas de granizo.

Pero la jornada con las precipitaciones más concentradas fue la del sábado 7 de octubre, cuando una tormenta barrió el litoral alicantino y dejó hasta 38,2 litros por metro cuadrado en Benidorm, más de la mitad (21,6) en solo una hora. También llovió, aunque mucho menos, el último día del mes.

En el cómputo del mes, los valores más altos de lluvias se registraron en las localidades costeras de la provincia de Alicante de Xàbia, con 58,4 litros por metro cuadrado, y Benidorm (45,8). Las capitales de provincia anotaron 8,6 litros (Castellón), 13,2 (Alicante) y 17 (Valencia).

Mientras, no alcanzan el acumulado de cinco litros por metro cuadrado zonas del interior norte de Valencia y el interior sur de Castellón: 4,4 en San Antonio de Benagéber, 4,2 en Chelva, 3,4 en Turís y 2,5 en Hireguelas, que lidera la lista de municipios con más anomalías de precipitación.