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Entrevista Vicent Soler y Clara Ferrando

Hablan los padres de los presupuestos de la Generalitat

Levante-EMV realiza una entrevista a dos bandas con Vicent Soler y Clara Ferrando

Hablan los padres de los presupuestos de la Generalitat

Donde había una gran pintura religiosa barroca de Conchillos, hoy está la recreación de Boix del héroe maulet de la Guerra de Sucesión Joan Baptista Basset. Toda una declaración de principios de un conseller «valencianista» que conoció antes el PSPV que el PSOE. El despacho, en el posiblemente palacio más bello del Consell, no desmerece en tamaño (incluso supera) al del president. Un signo de poder de los dueños de la caja autonómica, Vicent Soler (PSPV) y Clara Ferrando (Compromís). Conforman «el paradigma del buen mestizaje», eso dicen, y esta semana han pasado su tercer examen de presupuestos.

P ¿Los presupuestos más difíciles de la legislatura?

R Vicent Soler. No necesariamente, sí los más maduros, porque tenemos ganas de acabar la legislatura con una obra muy avanzada.

R Clara Ferrando. Al menos los más ambiciosos. Se acaba la legislatura y este Consell tiene mucha voluntad de hacer política.

P ¿Han discutido mucho entre ustedes?

R C.F. Entre nosotros, no.

R V.S. No más que en otros años.

P ¿No estira uno más hacia los departamentos del PSPV y otro hacia los de Compromís?

R V.S. Una pieza fundamental para la cohesión gubernamental no es solo la química entre presidente y vicepresidenta, sino el papel de esta conselleria, que es para todos sin distinción de partidos.

R C.F. Era como un reto además por las demandas de Podemos y lo hemos superado con nota.

P Ya que lo dice, ¿entienden que Podemos no haya dado su apoyo aún a las cuentas?

R V.S.. Es un partido que no está en el gobierno y es normal que muestre visibilidad de sus matices propios. Estoy convencido de que llegaremos a buen puerto porque hemos avanzado mucho antes de ir a Corts.

R C.F. Si yo fuera Podemos estaría contento de la negociación y de lo conseguido. No se ha podido cubrir el 100 % porque tampoco ha sucedido así con las conselleries. El pastel es más pequeño del que necesitaríamos.

P ¿Funciona la jerarquía entre ustedes?

R V.S.. Obviamente en la administración la hay. El responsable de la conselleria soy yo, pero la relación que tenemos es magnífica. Acordamos el 99 % de asuntos. Creo que es el paradigma del buen mestizaje.

R C.F. Lo comparto. También porque nos conocíamos antes. Ojalá gobiernos monocolor que vengan en el futuro tengan la colaboración y la lealtad que tenemos en el Botànic. El mestizaje no es sencillo, no se lo recomiendo a nadie [ríe], con los propios y los otros reclamando ahora en presupuestos, pero no hemos mirado si estaba delante un director de Compromís o de PSPV; sí miramos las prioridades políticas, como eliminar los barracones.

P No sé si llegaron a apagar los teléfonos de tanta presión.

R V.S.. La presión es normal. Aunque empieces a discutir presupuestos en junio, los últimos metros para subir el Everest son los más difíciles, pero estamos muy satisfechos. Lo que nos proponen nos gusta y a nosotros nos toca subrayar que hay restricciones.

P Hacer el papel de malos.

R V.S.. El de saber que hay unas normas y leyes.

P Llevan más de dos años juntos, ¿su peor momento?

R C.F.. Los de la elaboración de presupuestos.

R V.S. Pero más que entre los dos, como conselleria. Yo estoy contento de lo que han pedido los compañeros y de lo que han asumido . Nadie ha pedido la Luna, pero aún así nos toca decir...

R C.F. Que se han pasado.

P ¿Han echado el resto porque las elecciones de 2019 están ya muy cerca?

R V.S.. No nos hemos salido del acuerdo gubernamental del Botànic II. Las diferencias con Podemos han sido más bien de intensidad económica porque nosotros conocemos las restricciones financieras: al final el ministerio impone sus límites. Somos la comunidad peor financiada y tenemos la conciencia muy tranquila de que luchamos para que los valencianos no tengan unos servicios fundamentales por debajo de los de otros. Es una manera de hacer que el artículo 156 se aplique. Hay una situación de inconstitucionalidad del Gobierno de Rajoy por no aplicarlo y no hacer que esta comunidad tenga autonomía financiera. La Constitución tiene muchos artículos y hay que fijarse en todos.

R C.F. Solo pedimos el cumplimiento de la ley. Con el 156, 157 y 158 los conflictos territoriales que existen tal vez no hubieran sido de la misma manera.

P ¿Temen que Rajoy y Montoro pongan alguna zancadilla a las cuentas ante el incremento del gasto y el incumplimiento del techo de déficit?

R V.S.. Si leen la Constitución tienen poca autoridad política y moral para hacerlo, porque no se cumple el 156. Si gastamos menos que la media y no tenemos la autonomía financiera que mandata la Constitución, tenemos fuerza política y moral. Montoro me suele recordar que la ley está de su parte, pero con la ley no es suficiente. Busco razones para entender por qué los valencianos están maltratados históricamente y no encuentro más que la insensibilidad del Gobierno central por resolver los problemas de los valencianos.

R C.F. Decidimos mantener los 1.325 millones, que nunca han sido ficticios, como fruto de limpiar los 1.800 millones que sí existían. Esos 1.325 millones son la reivindicación de que queremos dejar de ser ciudadanos de segunda, tener un gasto que nos sitúe al menos en la media.

P El representante del Gobierno dice que las cuentas son insostenibles y generan inestabilidad...

R V.S.. Es una pena que lo diga un exconseller de Hacienda, que sabe como está el patio y como lo dejó él. Y sabe que es su gobierno el responsable de la situación financiera. Y en tercer lugar, ¿de qué parte está? ¿de los valencianos o del Gobierno de Rajoy que nos maltrata?

R C.F. Cuando tiene oportunidad de estar al lado de una financiación justa y de estar con un presupuesto social y eficiente, porque él tenía 1.100 millones en Sanidad fuera de presupuesto... Esa es la diferencia entre donde está él y este gobierno.

P ¿El gasto de personal crece más de lo que les gustaría?

R V.S. Hemos tenido que cargar el aumento de sueldo de los funcionarios decidido en Madrid. El ministerio decide y nosotros pagamos. Hay un problema muy grave de no lealtad. Montoro controla lo que pasa aquí y yo no sé nada de él. Hay un oscurantismo producto de la prepotencia de una administración central que no quiere dejar de ser juez y parte. Los servicios básicos se han reducido durante la crisis más de un 15 % en las comunidades mientras que los que le quedan al Gobierno central (pensiones y políticas pasivas de empleo) no han bajado. Eso no es lealtad constitucional.

R C.F. Eso es solo en 2015, si juntas una horquilla más amplia la deslealtad es más manifiesta.

P La acusación de deslealtad será recíproca cuando ustedes incumplen el techo de déficit.

R V.S. ¡En absoluto! No cumplimos porque no podemos. Claro que queremos, pero no podemos a no ser que cerremos escuelas o aumentemos listas de espera. Es el típico planteamiento centralista inasumible desde una cultura constitucional. Nosotros somos leales a los valencianos.

P Por lo que dicen, el retroceso recentralizador no es una amenaza, existe ya.

R V.S. Que diga la secretaria autonómica cuántos condicionantes han puesto para que venga el FLA.

R C.F. Un FLA que es un préstamo que hemos de devolver con intereses. Y tenemos que darles las gracias porque son intereses bajos. Con una financiación justa estaríamos en torno a 27.000 millones de deuda y no en casi 45.000.

P El presupuesto se dispara en más de 2.000 millones, pero más de mil son para la deuda. No es oro todo lo que reluce...

R C.F. Lo más impactante de este presupuesto es que uno de cada cuatro euros, en lugar de ser gastado en las personas, va a pagar principal e intereses.

R V.S. Una parte de la deuda es por la mala gestión de los gobernantes anteriores, así que el ciudadano ha de saber que ser elector y ser contribuyente está ligado. La parte de la infrafinanciación es obligado que sea condonada o mutualizada, algo que permita que todos estemos en el mismo punto de partida en el nuevo sistema.

RC.F. Es lo que defiende nuestro experto. Si no, ¿hasta cuándo podríamos llegar a pagar esa losa? Necesitamos una quita.

P ¿Hasta cuándo entonces arrastraremos el lastre financiero de la corrupción?

R V.S. Es que se viste de muchas maneras: pufos, sobrecostes... Las empresas públicas eran una cueva de ladrones donde todo estaba permitido. Todo eso cuesta, hasta saber qué función hace alguna gente en esas empresas. Eso hace difícil saber hasta cúando se puede aquilatar, pero puede ser largo. Lo que ha quedado claro es que este gobierno tiene unas prioridades muy diferentes.

P El departamento de Oltra es el que más sube. ¿Ha hecho valer la vicepresidencia, el rango?

R V.S. No. Era el área peor cuando llegamos. En Sanidad y Educación estábamos más cerca. Ahora tenemos también la renta de inclusión. Por eso el crecimiento relativo es el mayor, pero en términos absolutos la que más crece es Educación. Es donde hemos querido poner el énfasis, porque queremos infraestructuras adecuadas y no barracones.

R C.F.. La vicepresidenta es consellera de un área donde se presta atención a los sectores más vulnerables. Hemos querido seguir consolidando el espíritu de un presupuesto social y darle un impulso mayor sin tener más ingresos. No sé muchas veces ni cómo lo hacemos.

P El Gobierno dice que han recibido 2.000 millones más en dos años y que tienen menos gastos financieros.

R V.S. Lo que ha pasado es que el cuadro macroeconómico ha mejorado. Lo impresentable sería que el Gobierno recaudara más impuestos por ello y se lo quedara todo para él, pero ese cuadro crece más para nosotros y en cambio crece menos la parte que prevén entregarnos.

P Ahí íbamos, ¿por qué la C. Valenciana recibirá del sistema de financiación solo el 0,83 % más en 2018 mientras la media autonómica es un aumento de casi el 4 %?

R V.S. Es la pregunta que haré al ministro la primera oportunidad que tenga. Es absurdo que el mayor crecimiento económico previsto para 2018 lleve a un aumento de ingresos mucho menor a la media. Pone de manifiesto el oscurantismo del ministerio sobre cómo trabaja la financiación autonómica.

R C.F. Tenemos además la prueba en los impuestos cedidos. En esa parte que sí podemos controlar hemos tenido un crecimiento muy importante. Es significativo.

P ¿Se creen que va a haber un nuevo modelo de financiación este año?

R V.S. El compromiso del ministerio es que sí que lo haya.

P Pues queda poco margen...

R V.S. Yo, como santo Tomás, si no lo toco...

P Ustedes que saben de números, ¿la situación de Cataluña beneficia económicamente a la Comunitat Valenciana?

R V.S.Cualquier trauma institucional afecta negativamente a la economía. Si pasa con el socio comercial más importante que tenemos, el tema es especialmente grave. Me gustaría que Cataluña no se fuese, por nuestras necesidades comerciales y porque ha sido históricamente la punta de lanza en el respeto a la España diversa. Cualquier salida nos dejaría a los demás en una situación más difícil para luchar contra la inercia recentralizadora.

P En lo que están de acuerdo es sobre la tasa turística. ¿O no?

R C.F. Diría que sí.

R V.S. Quien demonice la tasa turística se equivoca. Está en media Europa, aunque no es el principal problema del sector valenciano. Hay otros gravísimos como la economía sumergida. Tenemos que hacer mucha pedagogía en el sector.

P Y con el titular de Turismo también, ¿no?

R V.S. El titular de Turismo quiere representar los intereses del sector. Si este tuviera otro criterio, él tendría otro también, en principio. Esta conselleria no se niega a nada, pero cuando ves la posición tan fuerte del sector y que no es el problema principal, hay que poner las cosas en su sitio.

R C.F. Es la figura de los impuestos a los que tenemos derecho que supondría unos ingresos dignos. Ya dije que nunca nos pondremos en contra de un sector tan importante, pero con más ingresos podríamos tener más inspectores para luchar contra el fraude, que redundaría en beneficio de las empresas.

R V.S. Además aquí no hay como en Baleares un único modelo turístico. La medida no puede ser uniforme.

P ¿Y sobre la aplicación del 155 están de acuerdo? ¿Inevitable o un error?

R V.S. Tendrían que opinar nuestros partidos. La disciplina de partido lleva a que tengamos que aceptar a veces cosas que no acabas de ver claro.

R C.F. Con el cumplimiento antes del 156 tal vez no hubieran tenido que aplicar ahora el 155.

P ¿Es un fracaso de la sociedad valenciana que no todos los partidos salgan el 18 de este mes a denunciar la infrafinanciación?

R V.S. Hay una unidad cívica importante, falta la política. Confío aún en que los partidos que dicen que no van, vayan. Sería magnífico para ellos y para sus intereses electorales. Los valencianos no lo entenderán, porque no vamos contra nadie.

R C.F. Es una responsabilidad histórica la posibilidad de modificar el sistema de financiación. No venir sería una irresponsabilidad total.

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