Un pedófilo diagnosticado que durante años realizó tocamientos a niñas de entre seis y diez años en una localidad de l'Horta Sud, cuyo nombre omite este periódico para preservar el anonimato de las víctimas, ha aceptado una pena de siete años de prisión por dos delitos de abusos sexuales a menores. Aunque inicialmente, tras ser arrestado en enero de 2016, el propio acusado reconoció cerca de una veintena de casos, al tratarse de hechos cometidos hace años y que ya habrían prescrito, la Audiencia Provincial de València solo lo condena por dos delitos, ocurridos en 2014 y 2015.

Concretamente se trataría de una niña de ocho años, a quien cuidaba la madre del procesado. Bajo el pretexto de leerle unos cuentos, el acusado llevó a la menor a su habitación y una vez a solas, con «ánimo libidinoso» le dio un beso, le quitó la ropa a la niña y le realizó tocamientos.

Asimismo, en el segundo caso que ha quedado probado, ocurrido el 24 de diciembre de 2015, la víctima apenas tenía seis años. El ahora condenado se valió de la misma excusa para quedarse a solas con la menor. Además, en ambos casos el acusado se prevalía de su complexión física, según ha quedado acreditado. Como consecuencia de los hechos la menor tiene secuelas en su desarrollo psicosexual.

El fiscal pedía 20 años de cárcel

El Ministerio Fiscal solicitaba para el acusado inicialmente una pena de veinte años y medio de cárcel por tres delitos de abusos sexuales, dos de ellos con penetración y el tercero en grado de tentativa. No obstante, éste último, al tratarse de hechos acaecidos en 2005 y no denunciados hasta 2016, éstos ya han prescrito.

De igual modo, dado el reconocimiento de los hechos por parte del acusado y tras contemplar una eximente incompleta de trastorno mental, la fiscalía ha bajado la pena a siete años de prisión, cinco por uno de los delitos y dos por el otro. De hecho, los médicos forenses que evaluaron al detenido sostienen que éste tiene el intelecto de un niño, padece una leve disminución del componente volitivo del psiquismo y un trastorno de pedofilia por el que requiere tratamiento.

El juicio por estos hechos se celebró el pasado jueves en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de València. El acusado, de 34 años y nacionalidad española, admitió todos los hechos, logrando así una considerable reducción de la pena solicitada inicialmente. Los investigadores de la Policía Nacional indagaron sobre una veintena de casos, que se remontaban a 1997. Solo tres denunciaron.