Tras el asesinato cometido en Vinaròs, muchos fueron los municipios que mostraron su repulsa a la violencia de género. El delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, indicó que «la violencia de género es una cuestión de estado. Es una violencia real, está a nuestro alrededor. Y hay que dar protección a las víctimas. Tenemos que detectar comportamientos que puedan derivar en este tipo de hechos y ser estrictos a la hora de arrinconar a los maltratadores, que no tienen sitio en la sociedad, los tenemos que expulsar». El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy también condenó el último asesinato machista ocurrido en Vinaròs y subrayó que «una sociedad libre de violencia contra las mujeres es posible» y que «juntos lo vamos a conseguir». Desde el Consell se hizo un llamamiento a toda la sociedad para que denuncie y condene estos actos con el propósito de acabar con cualquier acción fruto de la violencia de género. Los minutos de silencio en señal de repulsa se sucedieron en los municipios de la provincia de Castelló así como en parte de la Comunitat.