El corredor mediterráneo entre València y Castelló no tendrá el sistema europeo de señalización ERTMS (European rail traffic management system) hasta que no finalicen las obras de instalación del tercer hilo en las vías del lado «montaña» entre ambas ciudades. «No se puede colocar ERTMS en una línea cuando en la otra vamos a trabajar», admitió el ministro de Fomento, Íñigo Gómez de la Serna, al ser preguntado por la información adelantada por Levante-EMV de que en este tramo ferroviario no se operará con el sistema más fiable, el ERTMS, a pesar de que los trenes en ancho europeo circularán en vía única (por la del lado mar) tanto a la ida como a la vuelta de Castelló.

El ministro sigue sin dar una fecha clara para la puesta en servicio de este «experimento» ferroviario, único en España, que está «en pruebas» desde el pasado mes de marzo y sobre el que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), responsable de las obras, guarda un absoluto hermetismo.

Además, la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF) sigue sin dar la autorización definitiva para la puesta en marcha de la línea en ancho europeo entre València y Castelló, a pesar de que desde Adif se han remitido «un total de 134» requerimientos de información al organismo independiente que debe certificar la seguridad del nuevo tipo de explotación.

De la Serna sí que adelantó que se ha iniciado la formación de los maquinistas que intervendrán en este tramo, «es la última fase antes de la puesta en marcha», aunque sin desvelar la fecha concreta.

Por último, el ministro también adelantó que la línea de alta velocidad Madrid-València tendrá «wifi» siete años después de su inuaguración. La conexión inalámbrica a internet será posible tras instalar «a lo largo de 400 kilómetros de longitud, un total de 129 nodos y 91 repetidores en el interior de los túneles del trayecto», para que «puedan trabajar, consultar o enviar mensajes sin que se corte la conexión» o estar pendiente de que se pasa por uno de los túneles.