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Norma

El rechazo del PP al listón del 3% aboca a reformar la ley electoral sin consenso

La modificación de la norma saldrá adelante sin los populares porque el tripartito, Ciudadanos y los no adscritos tienen suficientes votos - El PP denuncia que el cambio sirve a intereses partidistas

La reforma de la ley electoral valenciana, que incluye como plato fuerte la rebaja del listón electoral del 5 al 3%, saldrá adelante sin el consenso al que aspiraba el bipartito. El PP valenciano oficializó ayer su rechazo a votar la propuesta redactada por Compromís para establecer unas nuevas reglas del juego para los comicios de 2019, un cambio que tiene como principal objetivo evitar que partidos minoritarios, como Esquerra Unida, se queden fuera.

Se trata de una vieja reivindicación de la izquierda valenciana, pero que ahora puede ser fundamental para reeditar un segundo Botànic. El último sondeo publicado por Levante-EMV recogía como clave para reeditar el pacto de izquierdas la entrada de EU en el Parlamento valenciano.

La formación se ha quedado fuera con un porcentaje del 4,7 % y pese a obtener más de 106.000 votos. En unas elecciones con resultado ajustado entre los dos bloques, la vuelta al parlamento de EU es una garantía para conservar el gobierno. El PP es consciente de ello y de ahí su negativa a avalar una reforma legal que puede condenarles a seguir en la oposición.

El diputado popular Luis Santamaría compareció ayer en rueda de prensa para denunciar lo que consideran una reforma «a medida» de la izquierda. Santamaría mantuvo que el tripartito les ha dejado fuera ( ni siquiera les han remitido la propuesta redactada por Compromís) y se quejó de que en una ley tan fundamental «se hurte» el debate y se deje fuera al partido más votado en la Comunitat.

«Visión cortoplacista»

Según el diputado, la izquierda ha renunciado a una reforma más amplia (en el marco de la reforma estatutaria) y ha presentado una propuesta descafeinada «con visión cortoplacista» y con el único objetivo de «servir a sus intereses partidistas».

El diputado asegura que no les han dejado debatir la propuesta ni someter a discusión sus ideas como que un tercio de los diputados fueran elegidos directamente.

Santamaría reiteró su rechazo a la rebaja de la ley electoral bajo el argumento de que con la ley actual el90% del electorado está representado y que dar entrada a formaciones que estén por debajo del 3% amenazaría la estabilidad en la institución.

La postura del PP aboca pues a una nueva ley sin unanimidad, al tiempo que la aprobación de la reforma normativa queda en manos de Ciudadanos y de los cuatro diputados no adscritos. En principio, ambos están dispuestos a votar con el tripartito, lo que permitiría sumar los 66 votos necesarios para los dos tercios que se necesitan para reformar la ley electoral. El PP apeló ayer a estas formaciones para que cambien su voto.

La previsible votación no será la foto que el PSPV buscaba (se deja fuera al principal partido de la oposición) pero no existe intención de postergarla, ya que el tripartito quiere que la nueva ley se aplique en las elecciones de 2019.

El síndic de Compromís en las Corts Valencianes, Fran Ferri, reaccionó ayer a las críticas el PP y lo acusó «de esconder sus intenciones verdaderas». «Lo que realmente quiere es bloquear cualquier reforma de la ley electoral valenciana. No quiere rebajar la barrera electoral del 5% porque está en contra de la pluralidad. No quiere mejorar el equilibrio de género porque está en contra de la igualdad entre hombres y mujeres. Y no quiere listas desbloqueadas porque prefiere la vieja política donde los partidos tienen más poder que la ciudadanía», señaló.

Además, negó la acusación de falta de participación y recordó que la comisión de estudio ha trabajado durante más de un año, con decenas de comparecencias y se elaboró un dictamen. El síndic del PSPV, Manolo Mata, asegura que el PP se ha autoexcluido.

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