Efectivos de bomberos siguen este domingo con los trabajos de extinción del incendio de Culla, activo desde el viernes y controlado desde las 10 horas de este domingo tras arrasar más de 400 hectáreas en la localidad y municipios colindantes. La actuación de siete medios aéreos, entre ellos tres aviones Air Tractor y cuatro helicópteros, además de 10 dotaciones de bomberos y otras 12 de bomberos forestales, hizo posible apagar las llamas del incendio. No obstante, durante la tarde aún quedaban numerosas zonas humeantes por lo que no fue dado por controlado.

El alcalde de Culla, Víctor Fabregat, indicó que el fuego se inició en el Mas de la Sobalma, en la partida de masías de Paulo. La Guardia Civil y la Policía Autonómica están investigando el origen de las llamas. «Todavía no lo tenemos claro y están abiertas todas las posibilidades», indicó el primer edil. Aunque se baraja la opción de que el foco inicial haya sido una quema de rastrojos , pero es algo «que deben decir los técnicos».

En total, el fuego arrasó al menos 400 hectáreas y el Consorcio de Bomberos de Castelló lo declaró estabilizado a primera hora de la tarde. Las llamas han afectado a zona de matorral y se pudieron salvar tanto el pinar como los cultivos existentes en la zona.

El Mas de Blayo, quemado

El Mas de Blayo se ha quemado y la vivienda ha quedado destruida. En este sentido el alcalde ha incidido en que desde el Ayuntamiento se realizarán todos los trámites necesarios para que puedan recibir ayudas de emergencia con las que reconstruir la vivienda. Se ha quemado la casa y también todo el almacén de almendras recolectadas durante el pasado otoño. Afortunadamente se han salvado las ovejas de la explotación ganadera que hay en la masía.

Durante el pasado viernes, cuando fue declarado el incendio, se evacuaron a más de 50 personas de una veintena de masías en el término de Culla y también a los alojados en el hotel Aldea Roqueta. En el caso del hotel los huéspedes pudieron regresar ayer al edificio ya que el fuego se quedó a más de medio kilómetro de distancia , según relató Fabregat.

En muchos casos se produjo casi un milagro, ya que numerosas masías se salvaron de las llamas. El fuego ha quemado todo el matorral de su entorno, pero los edificios, más allá de la masía afectada, se pudieron salvar.

El incendio también se siguió con preocupación desde La Torre d'En Besora. En este caso, el alcalde, David Vicente Segarra, apuntó que durante toda la noche del viernes al sábado dos unidades de bomberos permanecieron protegiendo el municipio y las masías del entorno. El fuego se quedó a centenares de metros de algunas masías del término municipal de la localidad. Pese a que las llamas no llegaron a la puerta, la noche sí que se vivió con preocupación y sin que nadie hubiera pegado ojo.

Puig visita la zona afectada

El presidente del Consell, Ximo Puig, visitó la zona afectada por el fuego y reclamó a la ciudadanía «ser más prudentes que nunca» ante la situación «de extrema gravedad» que se vive en el monte valenciano por el importante estrés hídrico. «Estamos ante un peligro enorme», incidió Puig.

Así se manifestó desde el puesto de mando avanzado de los servicios de emergencias, situado en la pedanía de Los Rosildos del municipio de la Serra d'Engarceran, hasta donde se desplazó con el director de la Agencia de Seguridad, José María Ángel, para conocer la evolución de las tareas de extinción.