El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha exigido esta mañana al Gobierno de España que transfiera de inmediato los 1.500 millones a favor de la administración valenciana correspondientes a la liquidación del modelo de financiación del ejercicio 2016 que el Ejecutivo de Mariano Rajoy suele enviar a mitad de año. "Son recursos nuestros", ha remarcado el jefe del Consell en su comparecencia tras la reunión entre representantes del Consell, los partidos con representación en las Corts, empresarios, universidades y sindicatos para conocer los detalles del estudio de la comisión de expertos sobre los avances en la reforma del modelo de financiación.

Puig ha denunciado que los trabajos sobre el modelo están estancados por falta de una posición clara del Gobierno ya que las autonomías sí que han puesto sobre la mesa su postura la modificación del sistema de reparto del dinero entre administraciones. El presidente valenciano ha puesto como plazo este mes para que el Gobierno concrete los detalles de la reforma tras el incumplimiento de aprobarla en 2017 y cuando se cumple ya el cuarto año de un modelo caducado que nació en 2009 para un quinquenio.

En la reunión de la comisión mixta celebrada esta mañana en el Palau de la Generalitat, los expertos han trasladado a Consell, partidos y sociedad civil la necesidad de que se aborden cuestiones como la insuficiencia del sistema de financiación que sitúan en 16.000 millones, la falta de equidad del actual modelo, del que los valencianos salen claramente perjudicados, con una grieta de hasta un 60% menos de fondos para políticas sociales respecto a las autonomías mejor financiadas o una nueva corresponsabilidad fiscal.

Para el portavoz de Economía del PP, Rubén Ibáñez, la reforma del modelo es necesaria, pero en su opinión no toda la política valenciana puede basarse en la reivindicación al Gobierno sino en gestionar mejor ya que el Consell dispone de más dinero del que tuvieron los gobiernos populares en la Generalitat. Ibáñez también vinculó la reforma de la financiación a la necesidad de que el Gobierno de Rajoy pueda aprobar los presupuestos.

El síndic socialista en las Corts, Manolo Mata, cree que las cifras que trasladan los expertos son dramáticas y recuerda que los gobiernos valencianos del PP aumentaron la deuda de la Generalitat de 900 euros por valenciano a 9.000. En su opinión el Gobierno de Rajoy busca la aniquilación del Estado del Bienestar que prestan las autonomías.

Para el portavoz de Compromís, Fran Ferri, el Gobierno de España solo aporta incumplimientos, chantajes y excusas para la reforma de la financiación y asegura que su partido apoyará cualquier reivindicación de los valencianos aunque pueda molestar a quienes solo aspiran a mantener a Rajoy en su silla, indicó.

El líder de Podemos, Antonio Estañ, ha valorado esta mañana que los expertos han trasladado al Consell que el Gobierno de España ya ha mostrado su voluntad explícita de demorar la reforma del modelo y abogó por tejer complicidades con el resto de autonomías para que el Gobierno no pueda marcar el ritmo.

En opinión del diputado de Ciudadanos Tony Woodward será complicado que en 2018 se avance hacia la reforma del modelo de financiación.

Al parecer de los sindicatos Comisiones Obreras y UGT es el momento de retomar las movilizaciones porque el Gobierno no parece dispuesto a tomar la iniciativa y para el presidente de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), Rubén Alfaro, los municipios salen doblemente infrafinanciados, primero por la falta de un modelo de financiación y segundo por valencianos, ya que sufren también la infrafinanciación de la Generalitat.

Según el presidente de la Confederación Valenciana de Empresarios (CEV), Salvador Navarro, la reforma del modelo de financiación tiene visos de alargarse aún más en el tiempo. "Nos sentimos españoles de tercera", aseguró ayer Navarro.