No hubo declaraciones de dirigentes del PP valenciano sobre la primera jornada del juicio a la parte valenciana del caso Gürtel, la que investiga la presunta financiación ilegal de los populares en las campañas electorales de 2007 (municipales y autonómicas) y 2008 (generales). Solo para defenderse de las críticas del jefe del Consell y del PSPV.

La presidenta del PPCV, Isabel Bonig, estuvo en Madrid, en la junta directiva nacional del partido, y no comentó el inicio del juicio. Sí tuvo unas palabras el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, antes de una conferencia de la presidenta madrileña, Cristina Cifuentes. «Lo que todos queremos es que acabe y aquellos que sean responsables según los tribunales cumplan con sus penas», sostuvo.

Méndez de Vigo aseguró que el Gobierno respeta y acata lo que dicen los tribunales e insistió en la importancia de que este asunto pueda ya cerrarse: «Es un caso que lleva muchísimos años, ya no recuerdo cuántos».

A su juicio, poner fin al escándalo aportará «tranquilidad a la gente» y por eso el Gobierno quiere que el tema «acabe». «Los primeros que estamos en contra es el Gobierno, es el partido. Que eso acabe me parece muy buena noticia», dijo.

Sin embargo, para los actuales responsables del Consell los populares aún no han asumido las responsabilidades políticas por la corrupción. «Se trata de esclarecer exactamente en términos jurídicos lo que pasó», dijo el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, para que «finalmente se haga justicia, se devuelva el dinero sustraído a los valencianos y que, en definitiva, a partir de ahora el PP asuma las responsabilidades políticas que aún no se han asumido».

En esa línea, el portavoz del PSPV, Jorge Rodríguez, pidió «condenar» y «depurar responsabilidades», porque «no es suficiente pedir perdón».

Para el presidente de la diputación, «lo normal» es que el expresidente Francisco Camps «se vaya» del Consell Jurídic Consultiu, pero no comparte la modificación del Estatuto de los Expresidentes, como plantea Podemos.

Respondió la vicesecretaria regional del PPCV, Elena Bastidas. Produce «sonrojo» y «vergüenza», dijo, que Ximo Puig y Jorge Rodríguez hablen de corrupción cuando «protegen a imputados y permiten casos turbios en las instituciones que presiden», en referencia al alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri.