El anuncio del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, de que la Comisión Europea ha incluido a Zaragoza en el Corredor Atlántico se ha convertido en un acicate para los empresarios valencianos, que ven en esta operación una gran oportunidad para consolidar la comunicación ferroviaria de mercancías entre el Mediterráneo y el Cantábrico.

Para ello quedaría todavía un gran paso: que se concreten las promesas de mejorar ostensiblemente la línea Sagunt-Teruel-Zaragoza, todavía sin electrificar y con grandes carencias que impiden un tráfico fluido.

Por eso, los principales responsables empresariales valencianos insisten en esta necesidad que, junto al Corredor Mediterráneo, consideran una de las prioridades logísticas de la Comunitat Valenciana.

La inclusión de Zaragoza en el Corredor Atlántico supondrá la apertura de un ramal de mercancías ferroviarias que entraría desde Francia a la Península Ibérica por Irún para culminar en la capital aragonesa, previo paso por Pamplona.

De este modo, se aprovecharía el gran potencial como nudo logístico de Zaragoza, a mitad camino tanto por carretera como por tren entre Madrid y Barcelona. ¿Pero qué le falta a la capital maña? Un puerto marítimo. Ahí es donde entran en juego València y Sagunt. La adecuación de la vía entre la ciudad romana y Zaragoza, unida al ramal anunciado del Corredor Atlántico, permitirían la cuadratura del círculo: la conexión ferroviaria de los litorales Mediterráneo y Cantábrico.

Entre los empresarios valencianos, a priori, el anuncio de De la Serna ha supuesto un punto de esperanza de cara a que se cumplan estos pronósticos, aunque inciden en que es imprescindible que se cumplan los compromisos expuestos con la línea ferroviaria entre Sagunt y Zaragoza.

En ese sentido, el presidente de la Fundación Pro AVE, Federico Félix, señaló que el ramal del Corredor Atlántico a Zaragoza «es una gran noticia siempre y cuando quede claro que las obras de Sagunt vayan adelante tal como están comprometidas, porque nos uniría con el Cantábrico».

Por su parte, el decano del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunitat Valenciana (COIICV) y una de las caras visibles de Ferrmed, Salvador Puigdengolas, incidió en que se trata de un paso «bastante importante para abrir un eje de conexión entre el Cantábrico y el Mediterráneo, que permitirá mejorar la competitividad empresarial de la Comunitat Valenciana».

Asimismo, incidió en que la mejora de la línea Sagunt-Zaragoza sería clave para convertir a la Autoridad Portuaria de València (APV) -bien con el puerto de Sagunt o el de València- en el punto de salida marítima de referencia para todas aquellas mercancías que partan desde Zaragoza.

En un orden similar se pronunció Salvador Navarro, presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), que destacó que «todo lo que suponga mejorar la conectividad ferroviaria con Zaragoza es positivo, se genera masa crítica de mercancías que puede ser transportada a través del Corredor Cantábrico-Mediterráneo y, por tanto, a los puertos de Castelló y de València».

Corredor Mediterráneo

La Conselleria de Obras Públicas también valoró en principio este nuevo ramal a Zaragoza ya que «sus efectos serían beneficiosos una vez ejecutados los tramos de Sagunt-Zaragoza y del Corredor Mediterráneo porque contribuiría a la consolidación del eje Mediterráneo-Cantábrico que une y facilita la conexión entre València y sus puertos, Bilbao y Zaragoza».

No obstante, incidieron que «la Generalitat Valenciana espera que el nuevo anuncio del ministro de Fomento no vaya en detrimento de las prioridades en infraestructuras en la Comunitat Valenciana como son el tramo Sagunt-Zaragoza y el Corredor Mediterráneo».

No obstante, parece que esa no es una preocupación latente entre los empresarios valencianos. El secretario general y director de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Diego Lorente, recalcó que «cada corredor tiene un plan y que avance uno no hace que el otro no lo haga». «Toda conexión de ramales es positiva y este nos permitirá llegar al Cantábrico. Lo más importante es complementar una España radial con otra circular y el ramal a Zaragoza va en este sentido», añadió Lorente.

Por su parte, Salvador Navarro, de la CEV, insistió en que no le consta que se estén postergando las inversiones en el Corredor Mediterráneo: «Ayer mismo -por anteayer- el ministro reiteró el compromiso de inversión de 335 millones de euros en el tramo Zaragoza-Sagunt y se están cumpliendo los plazos comprometidos. Sirva como ejemplo la finalización en el día de ayer de las obras de comunicación tren-tierra en toda la línea».

Inversión del Puerto de València

A lo largo del año pasado, el Ministerio de Fomento se comprometió a invertir hasta 335 millones de euros hasta el año 2022 en esas mejoras en la línea Sagunt-Teruel-Zaragoza. Sin embargo, esa cantidad económica no está presupuestada todavía.

A pesar de ello, el presidente de Adif, Juan Bravo, aseguró el pasado mes de octubre que esta actuación está garantizada incluso en el caso de que se prorroguen los actuales presupuestos generales para 2018, gracias a los propios fondos de la administración ferroviaria.

Realmente, la única gran inversión que ya se ha efectuado recientemente en esta línea es la realizada por la propia Autoridad Portuaria de València, que destinó este verano 53 millones para mejorar el tránsito de los trenes de mercancías. La gran inyección gubernamental todavía está por llegar.