La Cruz de los Caídos en el que ha sido su emplazamiento de la plaza de España de Callosa de Segura durante más de siete décadas ya es historia. El dispositivo para retirar el símbolo ha comenzado sobre las cuatro de la mañana. Los operarios han cortado la Cruz y la han elevado con una pluma hasta ubicarla en un camión. En estos momentos están trabajando para retirar el monolito de la base, donde se encuentran las inscripciones de los caídos. La maniobra se ha realizado entre un fuerte dispositivo de seguridad que ha impedido el paso de vecinos a la plaza y sin apenas incidentes -al margen del que se produjo con la entrada de un grupo de falangistas al principio de la noche, dos de ellos detenidos-.

Sobre las cinco de la madrugada las campanas de las iglesias del municipio han sonado para avisar de lo que estaba ocurriendo. El párroco de la iglesia de San Martín y el portavoz de la plataforma de Defensa de la Cruz, Toni Illán se han acercado a los trabajadores para entregarles una documentación, en un último intento de paralizar su actuación, que no ha tenido éxito. Algunos vecinos de la Plataforma Ciudadana en Defensa de la Cruz han cantado canciones desde los balcones, entre otras "Adiós con el corazón". Un grupo de jóvenes de izquierda ha celebrado la retirada con lemas como "No hay dos, sin tres, República otra vez", algo que ha provocado un enfrentamiento verbal con otros vecinos, en el que ha tenido que intervenir la Guardia Civil para rebajar los ánimos.

El equipo de gobierno tripartito (PSOE, IU y Somso Callosa) ha estado toda la noche en el Ayuntamiento, viendo desde una de las ventanas las maniobras para retirar el símbolo. La Cruz de los Caídos se retira, según el gobierno municipal, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica. Fue en marzo de 2016 cuando se aprobó un acuerdo plenario para eliminar el monolito de la Plaza de España, donde se ubica la iglesia arciprestal de San Martín. Aunque el obispado defiende que esa plaza es propiedad de la Iglesia, ese es un argumento que rechaza el tripartito, que alega que es un bien municipal que está registrado como tal. La Plataforma en Defensa de la Cruz defiende que su carácter exclusivamente religioso y recuerda que ya se retiraron las inscripciones que aludían a José Antonio Primo de Rivera así como placas de Falange.

No obstante la Generalitat ha apoyado al tripartito en la retirada de la Cruz. Toda esta situación ha dado lugar a una batalla judicial de los partidarios de mantener la Cruz contra el Ayuntamiento y el tripartito. Aunque ha habido algunas resoluciones que, según el gobierno, avalan la retirada, la otra parte alega que todavía quedan diversos procesos judiciales pendientes e insisten en que no se debería de haber actuado hasta que todos estén resueltos