Un meteorito de más de 33 kilos formado hace 4.600 millones de años, la maqueta de un gran pterosaurio -uno de los primeros vertebrados en ser capaz de volar- o huellas de tortuga primitiva descubiertas en los yacimientos de Domeño, Quesa y Cortes de Pallás.

Son solo algunos de los atractivos que el visitante puede contemplar en el viaje que propone desde ayer la Universitat de València con su nuevo Museo de Historia Natural ubicado en su campus de Burjassot, un espacio con el que vuelve a contar después de 85 años: en 1932 se incendió La Nau, lo que provocó la pérdida de gran parte de los fondos del Gabinete de Historia Natural de la UV, que en su día era el segundo centro patrimonial y científico de toda España.

Aquel fuego se convirtió pocos años antes de la Guerra Civil en el fin de aquel centro museístico... pero también en el origen del actual. De hecho, en su inauguración ayer, el rector de la UV, Esteban Morcillo, apuntó que «no se puede hablar de un nacimiento sino de un renacimiento del antiguo gabinete de Historia Natural».

Cientos de miles de ejemplares de 32 colecciones científicas, según revela la UV, narrarán un viaje por la historia de la Tierra que abarca la Geología, la Paleontología, la Botánica, la Zoología y otros legados en los 900 metros cuadrados del edificio del nuevo museo.

La mayoría de estos fondos proceden del Museo de Geología de la UV -reconocido en 1996- y algunos de ellos se llegaron a recuperar del incendio gracias a la labor de los estudiantes y docentes de la época. Ahora, con la ayuda de la Generalitat, que lo ha incluido en su Xarxa de Museus, y de la Diputación de València, vuelven a estar a disposición de los valencianos.

La enorme maqueta de un pterosaurio, que vivieron hace unos 110 millones de años y de los que la UV tiene restos óseos en sus fondos, da la bienvenida a los visitantes. Una vez dentro, pueden descubrir estas «joyas» científicas de forma accesible -con una APP inclusiva para personas con diversidad funcional- o a través de gafas de realidad virtual. La UV, casi un siglo después, vuelve a tener un Museo de Historia Natural.