El Ministerio de Fomento ha adjudicado a la ingeniería IDOM el estudio informativo del nuevo eje ferroviario pasante de València, piedra angular del corredor mediterráneo. Sin embargo, el punto de partida del estudio, adjudicado por 347.433,47 euros es exactamente el mismo que el aprobado «definitivamente» el 13 de octubre de 2008, que llegó a disponer incluso de un proyecto constructivo, la última fase antes de ser incluido en los presupuestos generales del Estado y de que comiencen las obras.

El futuro en este caso es volver al pasado con una razón legal de por medio: el retraso en el inicio de las obras del túnel pasante ha hecho que caducara la declaración de impacto ambiental favorable que recibió el proyecto.

Fomento estima también que existe margen de mejora en los proyectos constructivos no ejecutados y en el pliego del concurso se considera «conveniente» estudiar «alternativas a la solución inicial en el caso de que se planteen otras soluciones para la integración de la Estación de Valencia».

En todo caso, el contrato tiene un plazo de ejecución de 24 meses y comprende la redacción del estudio informativo, así como el apoyo en el trámite de información pública. De cumplirse los plazos, los proyectos no estarían disponibles hasta 2021 pese a que estas actuaciones ya se contemplaban en el convenio firmado el 26 de febrero de 2003 entre el Ministerio de Fomento, la Generalitat Valenciana, Renfe y GIF (actual ADIF) para la remodelación de la red arterial ferroviaria de la ciudad de Valencia.

Ayer, Fomento prefería hacer una lectura positiva recordando que el ministro Íñigo de la Serna considera la construcción de este túnel como «uno de los elementos básicos del compromiso de participación del ministerio en el desarrollo de la integración ferroviaria en Valencia».

Según Fomento, la futura estación central de Valencia está prevista a dos niveles soterrados; el superior para servicios de alta velocidad que finalicen en Valencia, y el inferior para servicios de alta velocidad pasantes y para servicios de Cercanías y regionales en ancho ibérico.

El túnel pasante conectará el nivel inferior de la nueva estación-situado a 23 metros- con la línea València-Castelló-Tarragona, además de con la línea de alta velocidad València-Castelló (en planificación todavía) a la altura del límite de los términos municipales de Valencia y Meliana. El nuevo eje, de unos 9 km y un coste de unos 880 millones, resulta fundamental, ya que permitirá que la estación de València no funcione en fondo de saco, «incrementando notablemente su capacidad», sostiene Fomento.