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Reversión sanitaria

Ribera Salud perderá un tercio de su negocio por el fin del contrato de Alzira

La factura de 2016 a la Generalitat supuso cerca de 193 millones pendientes de los ajustes de liquidación

Ribera Salud perderá un tercio de su negocio por el fin del contrato de Alzira

Pierden el emblema del «modelo Alzira» pero también una parte importante de su negocio, al menos, un tercio del total. Pese a que el grupo Ribera Salud nunca ha querido cuantificar cuánto se resentirán económicamente tras el fin del contrato con la Conselleria de Sanidad en el área de salud de la Ribera, las cuentas presentadas por el grupo del pasado 2016 dan una pista: al menos un tercio del total del dinero que mueve el grupo empresarial anualmente procede del departamento de Alzira que gestionan a través de la UTE Ribera Salud II con una participación al 96 %.

Así se deduce de las cifras presentadas por Ribera Salud SA y sus sociedades tras cerrar 2016. En ese ejercicio, la cifra de negocio del grupo se elevó a 448.981.248 euros con un beneficio neto de 8,2 millones de euros, según la documentación oficial. Para esa anualidad la conselleria pagó cerca de 193 millones de euros a la empresa por la gestión de Alzira, en concepto del canon que se establece anualmente tras multiplicar el censo de habitantes por la cápita (un precio fijo que se actualiza anualmente y que en ese año ascendió a 775,45 euros por persona). Este dinero se abona a la empresa, independientemente del número de habitantes que después necesiten de atención médica.

Este pago de la administración se ajusta, sin embargo, en las liquidaciones y que se cierran a posteriori con un retraso de unos dos años. En estos acuerdos se ajusta el dinero que la empresa debe devolver a la conselleria, por los enfermos «propios» atendidos fuera de la Ribera, por ejemplo, y viceversa. En los últimos años, las liquidaciones entre administración y empresa, han favorecido a la primera con la devolución de al menos un 20 % del total del dinero pagado.

Descuento por la liquidación

Aplicando esta tendencia, el «negocio» de Alzira en 2016 podría rebajarse hasta los 153 millones de euros -a falta del cierre de la liquidación de ese año-. Tomando esa cifra como referencia, gestionar la Ribera supuso en 2016 para el grupo un 32 % del volumen de negocio total, 448 millones.

La cifra aumenta si se comparan las cifras de negocio de 2015, año para el que la conselleria ya ha propuesto una cifra de liquidación. En ese ejercicio el volumen de negocio del grupo fue de 348 millones de euros y la factura de Sanidad -restando ya lo propuesto por conselleria para recibir de la empresa- se quedaría en unos 143 millones,en total un 39% del total. Preguntados al respecto del «agujero» que dejará Alzira en las cuentas del grupo, desde la empresa no han querido en estos últimos días de reversión hablar de cifras limitándose a asegurar que son una «multinacional» con «varios proyectos dentro y fuera de nuestro país» y que el impacto por la pérdida de Alzira «no es económico, porque en estos proyectos y a diferencia de lo que piensan algunos, no se está por ganar dinero».

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