La Conselleria de Sanidad ha pedido a sus profesionales que se extreme la vigilancia para detectar y vacunar también a aquellos niños que no estén inmunizados contra el sarampión. Esta es otra de las recomendaciones lanzadas desde el Servicio de Epidemiología de la Dirección General de Salud Pública para intentar atajar los sucesivos brotes de sarampión que se han registrado en la Comunitat Valenciana desde inicios de año y que están comprometiendo el que se cumpla con el Plan de Erradicación de la Enfermedad que está en marcha en el sistema sanitario valenciano desde hace más de 15 años en sintonía con las directrices europeas.

Los 66 casos de la enfermedad declarados desde el 1 de enero (51 confirmados y otros 9 pendientes) y el repunte generalizado de casos en el resto de países europeos, han llevado a la conselleria a posicionarse y a lanzar un alerta interna para inmunizar a sus profesionales «de forma urgente» y evitar así nuevos contagios ya que la mitad de los producidos hasta ahora han sido en el ámbito hospitalario. Desde Sanidad aseguraron ayer que están en los primeros compases de la acción y que, por tanto, aún no había datos exactos sobre cuántos profesionales se vacunarán.

Junto a esta medida «urgente», se ha solicitado localizar a esos niños que no estuvieran inmunizados en las consultas. De esta forma, se pide recurrir al Sistema de Información de Vacunas (SIV) de cada uno de los pacientes para comprobar si han recibido las correspondientes dosis e ir cubriendo así las lagunas por las que el virus puede seguir proliferando.

«Nos hemos relajado»

En esta situación se pueden encontrar, actualmente, niños procedentes de otras comunidades o países, adolescentes o jóvenes adultos que solo hayan recibido una de las dosis o incluso niños residentes en la comunidad en edad de vacunarse pero que no han recibido las dosis por decisión de sus padres. Actualmente y según el calendario vacunal de la Comunitat Valenciana los niños se vacunan contra el sarampión en dos dosis: a los 12 meses y a los 3 o 4 años.

«Nos hemos relajado y ahora estamos viendo que viene mucha gente con una inmunización mala o no duradera que puede comprometer el sistema», aseguró ayer el presidente de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria, Aurelio Duque. En la misma línea se posicionaron ayer responsables de la Asociación Española de Pediatría (AEP) que animaron a «no relajarse» una vez los niños fueran creciendo y que se mantuviera el calendario vacunal más allá de la edad infantil.

A los médicos de familia, precisamente, al igual que a los de Urgencias se les ha instado, también, a que a que piensen en que esa fiebre o ese sarpullido con el que un adulto ha llegado a la consulta puede ser sarampión ya que seis de cada diez casos es en adultos de 25 a 44 años.

«Es algo que no es frecuente y, realmente, no piensas en ello», reconoció Duque que volvió a pedir a Sanidad la actualización del calendario vacunal del adulto ante problemas de inmunidad que se han sucedido en los últimos meses con enfermedades «infantiles» como el sarampión o las paperas.