Las Inspecciones Técnicas de Vehículos (ITV) se saturan conforme llega el buen tiempo y el calendario avanza hacia el periodo estival. Ante un viaje urge una puesta a punto al vehículo que le libre de toda sanción o accidente por una falta de control. Si a la temporada «caliente» se suma la llegada de la nueva normativa que endurece el control sobre las emisiones contaminantes se obtiene la cuadratura del círculo: un colapso en las ITV que suma un centenar de vehículos haciendo cola antes de las 7 de la mañana. Y es que el nuevo Real Decreto de la ITV entra en vigor el 20 de mayo.
Así, a la temporada alta de trabajo se suma la llegada de aquellos que pretenden pasar la inspección antes del endurecimiento de los controles. Aún así, la normativa contempla una demora de un año para que los centros consigan la instrumentación, la formación a los técnicos y las herramientas necesarias para conectar un sistema de diagnóstico al ordenador de a bordo para detectar posibles trampas. Sin embargo, los usuarios desconocen que existe un año más de plazo para que la ley en vigor tenga efectos prácticos para los usuarios.
Pequeño respiro tras las fiestas
En la estación de la ITV de Vara de Quart los vehículos en espera dan la vuelta a la manzana a diario desde finales de marzo. Los usuarios esperan con paciencia el turno tras más de tres horas de media. No es el único caso. Las estaciones están saturadas, aunque los empleados aseguran que ahora, tras las fiestas de Pascua, la afluencia de usuarios sin cita previa «es menor», aunque «aquí hay saturación siempre». «La nueva normativa ha hecho que aumenten algo las inspecciones, aunque nada cambiará a efectos prácticos tras el 20 de mayo», afirman desde los centros de ITV.
¿Qué supone el nuevo decreto?
Y es que cada vez son más los componentes electrónicos que, interconectados entre sí, juegan un papel clave en la seguridad de los vehículos que se lanzan año tras año. Por ello, mediante el software adecuado, el uso de la lectura de diagnóstico electrónico permitirá chequear sistemas que son clave a la hora de garantizar la seguridad en los vehículos actuales. Se trata de dispositivos como el Programa Electrónico de Estabilidad, el ABS, los airbag, los pretensores y el equipo de alumbrado y señalización.
Además, los nuevos tiempos han traído consigo una mayor conciencia medioambiental, pero también tecnología capaz de «imitarla». De ahí que uno de los aspectos más destacados del nuevo Real Decreto de la Inspección Técnica de Vehículos radica en el uso de herramientas capaces de detectar ese tipo de fraudes. Este instrumento se conecta al ordenador de a bordo del vehículo aunque las ITV valencianas aún no lo tienen.
A diferencia de lo que pasaba hasta ahora, se podrá adelantar hasta un mes la fecha establecida para pasar la inspección sin que esto afecte a la fecha de renovación prevista inicialmente. Esto facilita adaptar la agenda al trámite de pasar la ITV. En este mismo sentido, en caso de no superar la primera inspección, el usuario tendrá derecho a ir a otro centro ITV dentro del plazo de un mes y sin un coste extra. Antes del cambio normativo, se debía acudir al mismo centro tras subsanar las anomalías dentro de ese mismo periodo.
