El exvicepresidente de Repsol YPF Ramón Blanco Balín, identificado como el blanqueador de la Gürtel en Valencia, ha negado en la Comisión del Congreso sobre la supuesta financiación irregular del PP haber recibido comisiones durante su etapa en esa empresa y se ha desvinculado completamente del partido. "Niego cualquier vinculación con el PP y nunca he trabajado para el PP". Sobre Blanco Balín la Unidad de delincuencia económica y fiscal (UDEF) de la Policía Nacional lo identificaba como un hombre ligado al PP y amigo íntimo del expresidente del Gobierno, José María Aznar.

"En los 10 años que estuve en Repsol no participé en ninguna operación fraudulenta (...) y no se encontró absolutamente ni un solo gasto no justificado por parte de la dirección anterior ni de mi gobierno en Repsol", ha precisado el empresario, acusado en el juicio a la rama valenciana de la Gürtel, en el que se enfrenta a una petición fiscal de 15 años de cárcel.

Aunque en un primer momento Blanco Balín ha anunciado su negativa a contestar a la mayoría de las preguntas en la Cámara Baja, a medida que iba transcurriendo su comparecencia, ha decidido responder a algunas de ellas, principalmente las que no tenían que ver con la presunta financiación ilegal del PP.

El exvicepresidente de Repsol YPF ha negado las manifestaciones del líder de la Gürtel, Francisco Correa, en las que confesó que el empresario le dijo que las comisiones que percibió durante su etapa como vicepresidente y consejero delegado de Repsol, que ascendían a 60 millones de euros, las depositó en la cuenta Soleado en el banco suizo Credit Suisse (formada por grandes fortunas españolas). "Le puedo jurar por mis hijos que eso es total y absolutamente mentira", ha dicho Balín, y ha añadido: "No ha habido ningún ingreso en la cuenta Soleado relacionada con mi etapa en Repsol ni con mi etapa de Gas Natural (donde fue consejero delegado) y lo quiero dejar claro". Al respecto, el diputado Toni Cantó se interesó por el hecho de que "sólo jura por sus hijos cuando habla de Repsol pero no de la Gürtel". A lo que Blanco Balín ha respondido con un escueto: "No".

El empresario, que ha mostrado en algunos momentos de su comparecencia aparentes gestos de cansancio y de dolor, ha querido dejar claro que no puede "aportar ningún dato de utilidad" sobre la financiación irregular del PP porque desconoce "la estructura de financiación" del partido, en el que nunca ha militado. "Nunca me dieron la mas mínima información sobre sus actividades con el PP ni con los acuerdos que hubieran alcanzado con ellos respecto a las formas de facturar", ha asegurado en relación a Francisco Correa, y a su número dos, Pablo Crespo, con quienes mantenía una relación profesional.

Blanco Balín ha explicado que su trabajo consistía en asesorar a cuatro sociedades de la red, entre ellas la filial valenciana, Orange Market, pero ha precisado que nunca elaboró facturas para dichas mercantiles ni supo que las que se le enviaban fueran falsas: "Si hubiera sido el caso, hubiese sido el primer engañado". Ha recordado que está investigado en otros procedimientos judiciales, como el de la visita al papa en Valencia en 2006, cuyo juicio está pendiente de celebración, pero ha atribuido sus imputaciones a "una incorrecta valoración" de su trabajo.

La actitud de mutismo del empresario ha sido criticada por algunos parlamentarios, como el diputado socialista Felipe Sicilia, para quien "es muy difícil creer" que alguien con un 30 % de las participaciones de Orange Market y que le llevaba las cuentas, "ahora pretenda decir que no sabía nada de esa financiación irregular del PP a través de esas empresas". "Ustedes fueron facilitadores", ha señalado.

No así del diputado popular Francisco Molinero, que ha declinado hacerle preguntas y ha tachado la comisión de "ineficaz e innecesaria".