La generalitat entregó ayer las medallas. El piloto Ricardo García-Verde, fallecido cuando trabajaba en la extinción de los incendios en Chile, recibió la medalla de oro a título póstumo. Entre los 56 condecorados, dos agentes de la Guardia Civil de Chiva recibieron la medalla de oro por rescatar a un hombre en una riada en Turis y Esteban Romero, de la Policía de la Generalitat, la de plata por salvar la vida a dos personas fuera de servicio.