Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Negociación a tres bandas y un pelotazo de 39 millones

Cotino justificó por la crisis la venta de acciones aunque en 2007 Bancaja le había dado un préstamo de 52 millones

Las explicaciones que José Luis Olivas y Vicente Cotino dieron en el Juzgado de lo Penal 6 para justificar el pago de los 580.000 euros supusieron una clase acelerada de la cultura del pelotazo que imperó en la pasada «década prodigiosa). Y del maridaje impúdico de intereses cuando la crisis ya daba sus primeros zarpazos.

Vicente Cotino aludió al crac económico como el origen de la operación que les sentó en el banquillo y los acabó condenando. «Por la crisis en España, en 2008 me vi abocado a vender activos de Sedesa», admitió el sobrino del expresidente de las Corts, Juan Cotino. Aunque como contó Levante-EMV en su edición del 29 de mayo, Bancaja había concedido un préstamo de 52 millones a los Cotino en 2007 para reestructurar Sedesa. Sin embargo el empresario aseguró en el juicio que necesitaba vender las participaciones de su grupo empresarial en Proyectos Eólicos Valencianos SA -participada por Endesa (55%), Sedesa Inversiones (20%) y Bancaja (20%)-. Una tarea para la que encontró el mejor mediador posible: el entonces presidente de Bancaja José Luís Olivas quien, por su cargo, también era consejero de Iberdrola. Nadie mejor que él para cocinar esta operación de compraventa de acciones que se resolvió en apenas seis meses.

En este operación Olivas jugó a tres bandas, según admitió sin empacho y en tono suficiente durante el juicio. «Yo defendía los intereses de Bancaja y del señor Cotino, pero también los de Iberdrola, que quería tener un parque eólico en la Comunitat Valenciana». Sus mediaciones eran al más alto nivel: «Hablé con José Ignacio Sánchez Galán (presidente de Iberdrola) y también con Rafael Miranda (presidente de Endesa)» y cruzó correos con técnicos de Bancaja y de Iberdrola durante las negociaciones que desembocaron en la venta del 45% de Proyectos Eólicos Valencianos SA a Endesa, que ejerció su derecho de adquisición preferente, como accionista mayoritario. El coste total de la operación alcanzó los 120 millones ya que «la compradora también tuvo que asumir los 53 millones de deuda. Después de impuestos la plusvalía fue de 39,3 o 39,7 millones», admitió Cotino, durante su declaración en el juicio en penal 6.

Compartir el artículo

stats