Las piezas de la organización interna de Esquerra Unida no terminan de encajar. Un mes después de que Rosa Pérez fuera elegida como coordinadora general en el Consell Polític Nacional, la ejecutiva que dirige el partido sigue sin estar formada al completo (pero sí en activo) debido a la falta de acuerdo entre el equipo de Pérez y la lista de Rosa Albert, quienes aseguran que se mantienen "vetos" pese a lo acordado antes del proceso de elección: 12 integrantes de la lista de Pérez y 11 de la de Albert.
Las sensibilidades internas son variadas y difíciles de integrar. Desde el equipo de Pérez no encuentran los perfiles "adecuados" del otro bloque, el de Rosa Albert con "L´Esquerra a l´Ofensiva", donde se integra el Partido Comunista, Izquierda Abierta, Izquierda Plural e independientes.
Ante una situación que han calificado de "parálisis", han emitido un comunicado a su militancia para explicar su postura frente al bloqueo en el que se encuentra el proceso de integración y conformación de la dirección de la Ejecutiva. Piden la integración de sus miembros sin cuestionar si plantean "posturas diferentes".
En un comunicado, apelan a "superar" una etapa marcada por "luchas y deslealtades" internas y ponen como ejemplo los ataques "injustificados y desproporcionados" hacia el ex coordinador David Rodríguez y la diputada alicantina Raquel Pérez, cuestionados por un viaje a Cuba que pagaron con fondos públicos de la Diputación de Alicante pero absueltos por el juzgado de Alicante que no vio delito.
Así, argumentan con datos la necesidad de integrar a sus miembros en la ejecutiva con un porcentaje correspondiente a los resultados obtenidos en el congreso: Pérez se alzó con el 48%, Albert con el 44,5% y la tercera candidatura, de Óscar Navarro, con un 7,5%. Estos datos se tradujeron en 12 miembros de la lista ganadora, 11 para la de Albert y 1 para Navarro. El reparto de responsabilidades "debe ajustarse a la proporcionalidad", apuntan.
En este sentido, fuentes cercanas a Pérez dieron "por descontado" que la integración se haría con proporcionalidad. Recuerdan que los de Albert "ya habían aceptado previamente la distribución numérica y de responsabilidades", y subrayan la "generosidad" de la ejecutiva con sus compañeros de partido.
La última oferta que les hicieron era del todo "irrenunciable" por lo "extremadamente abierta" que era porque, aseguran, integraba a todos. Según apuntaron las mismas fuentes, "consistía en integrar con responsabilidad a todas las personas que proponían, siempre dependiendo de los perfiles, o bien en la ejecutiva o bien en las áreas de trabajo".
El comunicado del equipo de Albert les ha pillado por sorpresa, como reconocieron, pero siguen esperando una respuesta. Niegan en rotundo la "paralización" del partido por no haber formado la ejecutiva, "más bien al contrario", dado que EU está en funcionamiento "después de un largo parálisis para elegir a la nueva dirección".
