Las empresas valencianas se están volcando con los refugiados que llegarán en el barco Aquarius al puerto de València previsiblemente el próximo sábado. La patronal autonómica CEV, que colabora con el Ayuntamiento de la ciudad y con la Generalitat en el dispositivo para acoger a las más de 600 personas que van en el barco, envió ayer tarde un correo a todos sus asociados pidiendo ayuda y la respuesta está siendo "impresionante", según fuentes oficiales de la organización empresarial.

La petición era que las empresas asociadas que lo estimaran oportuno aportaran alimentos, medicamentos, ropa, productos de higiene y limpieza, servicios de limpieza, alojamiento, transporte, asistencia sociosanitaria, traductores, voluntariado y cualquier otro tipo de producto o servicio. Las citadas fuentes aseguran que algunas empresas han ofrecido incluso poner dinero.