El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha asegurado este jueves que la Comunitat Valenciana ha pasado de ser la comunidad "de Gürtel" y de la "corrupción" a ser "referencia de la solidaridad" por acoger a los 630 migrantes del barco Aquarius.

Puig ha respondido en las Corts Valencianes a una pregunta de la portavoz popular, Isabel Bonig, sobre el cumplimiento presupuestario, en la que le ha instado a no convertir la llegada de este barco, prevista para el sábado, en "un espectáculo televisivo" y a dejar trabajar a los profesionales.

El presidente ha asegurado que esta semana se han visto las dos caras de la Comunitat Valenciana, la del pasado, con la "constatación judicial de la financiación ilegal del PP", y la del presente, "como región europea que ha hecho un gesto humanitario para acoger a las personas del Aquarius".

"La imagen de la Comunitat Valenciana está mejor y el sábado, el puerto valenciano será el puerto de la dignidad de Europa", ha defendido, para avanzar también que su gobierno no renuncia a reivindicar una financiación y unas inversiones justas para este territorio