Su labor comenzó cuando las primeras necesidades fisiológicas estuvieron atendidas. Así, tras ofrecerles algo de comer y beber a los 630 inmigrantes que desembarcaron ayer en València comenzó el apoyo psicológico a los refugiados bajo la coordinación de Alicia Gilabert, psicóloga del equipo psicosocial de Cruz Roja.
"Llegaron con mucha inseguridad e incertidumbre. Con mucha ansiedad porque llevaban mucho tiempo sin saber hacia dónde iban. Y repetían su principal preocupación: ¿Y ahora que? ¿Dónde iban a ir? ¿Qué iba a ser de ellos? Si se habían separado de algún ser querido temían no volverlo a ver. Así que lo primero fue tranquilizarles, explicarles que lo primero era la necesidad física, conocer su estado de salud... El acompañamiento fue (y es) clave. Les acompañamos en todo momento. Sorprende ver gratitud en una mirada tan solo por tocarles el brazo de forma afectuosa. Estaban inquietos en las sillas porque arrastran mucho. Lo normal no es subirte en un barco cualquiera y separarte de tu familia, de tu país de tu vida", explica la psicóloga en una base del puerto de València donde esta mañana solo quedaba personal de Cruz Roja.
La trabajadora de Cruz Roja explica que los inmigrantes comienzan ahora "un proceso de duelo en varias vertientes. El primer proceso de duelo es la separación de la familia y la separación del país. Van a tener que empezar a vivir otra vez y... comenzar en un sitio nuevo es difícil. Pero el proceso de duelo es necesario. Porque es cuando el corazón te va a decir... No tienes lo que antes tenías... pero lo importante es seguir viviendo".
Alicia es cauta. Así que se niega a contabilizar cuánto tiempo de recuperación necesitarán los refugiados. "El tiempo es relativo. Hay personas que necesitarán meses y han personas que tardarán años. También hay que tener en cuanto lo que han perdido, lo que han dejado atrás. Lo que han perdido y pueden recuperar... y lo que han perdido y no recuperarán jamás".
Sin embargo, la experta hace hincapié en la importancia del trabajo psicosocial con los refugiados. "La mente guía lo que son nuestras acciones, es decir, nuestra conducta. Habrán muchas situaciones que les dejarán herida. Y la herida tiene que cicatrizar, pero duele mientras es una herida abierta, pero la cicatriz también. Todas las heridas se cierran pero si dejan la cicatriz muy marcada, a nivel emocional, es cuando luego vienen los problemas psicológicos posteriores. Hay personas que no tienen conciencia de que necesitan ayuda psicológica", explica.
En Cruz Roja existen programas que realizan apoyo psicológico a inmigrantes, aunque la labor que la ONG realizó ayer fue de emergencia. Y ante una emergencia el cariño y el acompañamiento es esencial. "Llevaban meses sin que nadie les demostrara cariño. Poco o mucho. Ninguno. Y estaban a pleno sol, en un barco donde no sabían bien adónde iban. Han llegado con mucha ansiedad. Este desembarco ha sido el final de un viaje a la deriva, pero ahora es el inicio real para todos los cambios que les esperan. Todo cambio lleva un proceso, y el proceso es difícil... pero no imposible", asegura la psicóloga de Cruz Roja.
Alicia da las claves para entender qué es el apoyo psicosocial. "Apoyo psicológico es saber observar. Reacciones, conductas, expresiones de la cara.. Saber leer unos ojos...", explica. Y ¿Qué vio en los ojos de quienes llegaron ayer? Alicia no tarda ni dos segundos en contestar: "Muchísima tristeza".
