"Entre mis compañeras de clase no hay ninguna chica que tenga especial interés por estudiar grado en ingeniería informática o similar. La verdad es que es una pena porque yo que sentí curiosidad por la programación desde los 11 años y ahora que empiezo la universidad me gustaría encontrarme con más chicas que compartieran esa pasión conmigo". Es la voz de Lucía, una joven que empezó a programar con 12 años y que con tan solo 18 años es CEO de su propia empresa (Unicorn Gamer).
Lucía no es la excepción, pero casi. De hecho, solo un 9% de mujeres de la Universitat Politécnica de València estudian grado en ingeniería informática. Por eso, la Universitat Politécnica de València no dudó en sumarse a DevWomen, una iniciativa sin ánimo de lucro promovida por Onestic -empresa con más de 10 años dedicada al desarrollo y la explotación de datos en comercio electrónico- que pretende visibilizar a las mujeres en el mundo de la tecnología, especialmente en el ámbito de la programación. Y es que la tecnología también es cosa de mujeres.
DevWomen nació hace un par de meses para construir una iniciativa compuesta por empresas, comunidades y, en definitiva, mujeres que quieran ayudar a dar visibilizadad a las mujeres desarrolladoras. Así, se están llevando a cabo diferentes actividades donde se intenta que al menos el 50% de los asistentes sean mujeres y/o estén organizadas mayoritariamente por mujeres. Entre las distintas actividades puestas en marcha (charlas, conferencias, cursos) destacan los retos de programación, con el objetivo de visibilizar a las tres primeras mujeres que consigan resolverlo.
"Tras más de 10 años trabajando en el mundo del desarrollo de software y del comercio electrónico, el equipo de desarrollo siempre ha contado con escasa presencia femenina. Queremos que eso cambie y fue por ello por lo que decidimos dar vida a DevWomen", afirma Guillermo García, CEO de Onestic.
Y es que "los perfiles técnicos son los más difíciles de encontrar para las empresas emprendedoras de nueva creación; si además analizamos con una perspectiva de género este sector, nos encontramos una situación en la que apenas encontramos mujeres dentro de las áreas técnicas. Necesitamos iniciativas como la de DevWomen para visibilizar y atraer mujeres en la tecnología. Tras lanzar más de 40 empresas y conocer a más de 3500 emprendedores seguimos echando en falta más mujeres desarrolladoras", destaca Javier Torregrosa, Talent Manager de Demium Startups, una de las incubadoras de startups más conocidas en España.
La Universitat Politécnica de València conoció el proyecto y se sumó de inmediato. "En la universidad queremos aumentar ese porcentaje tan bajito de mujeres (un 9%) que estudian grado en ingeniería informática y cuando supimos de la existencia de DevWomen vimos la enorme posibilidad de unirnos para luchar juntos en la misma dirección", afirma Silvia Terrasa, una de las primeras mujeres en dirigir una Escuela Técnica Superior de Informática en la Universidad Politécnica de Valencia.
