El porcentaje de población en riesgo de pobreza se situó en España en 2017 en el 21,6 % de la población, frente al 22,3 % del año anterior, según los resultados definitivos de la Encuesta de Condiciones de Vida de 2017 publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Mientras la situación mejora en el conjunto del país, en la Comunitat Valenciana empeora. El porcentaje de población valenciana en riesgo de pobreza asciende al 25,6 %, frente al 24,4 % del año anterior.

Es decir, que uno de cada cuatro valencianos vive con ingresos anuales por debajo de los 8.522 euros por persona. En todas la autonomías mejora este indicador salvo en la Comunitat Valenciana, Illes Balears, Extremadura y Murcia.

La población en riesgo de pobreza mide cuántas personas tienen ingresos bajos en relación al conjunto de la población. El umbral de riesgo de pobreza, siguiendo los criterios de la UE, se fija en el 60 % de la mediana de los ingresos por unidad de consumo de las personas. Por tanto, aumenta o disminuye en la medida que lo haga la mediana de los ingresos. Al crecer los ingresos por persona aumenta el riesgo de pobreza.

En la Comunitat Valenciana el ingreso medio anual por persona fue el sexto más bajo de España, con 9.801 euros, 1.273 euros menos que la media española (11.074 euros per cápita).

No obstante, el indicador que más se empieza a tener en cuenta para medir el riesgo de exclusión social es la tasa Arope, conocida así por sus siglas en inglés (At Risk Of Poverty and Exclusion). Esta tasa de riesgo de pobreza o exclusión social se construye con la población que se encuentra en riesgo de pobreza, o con carencia material o con baja intensidad en el empleo.

El 7,4 % de la población valenciana vive con carencias materiales severas (sufre al menos cuatro de los nueve carencias materiales que mide el indicador Arope). Este porcentaje está más de dos puntos por encima de la media estatal (5,1 %).

Entre las carencias materiales de la tasa Arope de exclusión social más frecuentes, cabe destacar en la Comunitat Valenciana las siguientes siete: El 37,5 % de los valencianos no puede permitirse ir de vacaciones una semana al año; el 5,1 % no tiene dinero para comer carne, pollo o pescado al menos cada dos días; el 9,8 % no puede permitirse manener la vivienda con una temperatura adecuada; el 49,4 % no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos de 700 euros; el 13,9 % ha tenido retrasos en el pagos de gastos relacionados con la vivienda principal en el último año; el 5,3 % no puede costearse un coche, mientras que el 10,6 % no puede permitirse tener un ordenador.